Cuando llega el invierno, la niebla se abre paso y ocupa los espacios que le pertenecen. Este de las encinas es muy suyo. La resistencia de los árboles, en medio de ese vaho lechoso? (José Luis Puerto) / Foto de Carlos Santiago
Estos fuegos del crepúsculo, que doran e incendian los espacios celestes y resaltan los perfiles de nuestras torres, acentuando su belleza, son una invitación a un fervor? (José Luis Puerto) / Foto de Ángeles Rebollo
Turroneras de La Alberca en los soportales de San Antonio
?El objeto artesanal satisace una necesidad no menos imperiosa que la sed y el hambre: la necesidad de recrearse con las cosas que vemos y tocamos, cualesquiera que sean sus usos diarios? (Octavio Paz) / Foto de Luis Carlos Santiago
nubes negras cubren un paraje de Frades de la Sierra
?Hay un paisaje materno, con el que aprendes a ver el mundo. Luego conoces más paisajes y pueden ser más bonitos, pero ninguno te parece mejor" (Julio Llamazares) / Foto de Manuel Lamas
LA PROVINCIA DEL ALMA. Área Recreativa Río Gavín, en El Cabaco
¿Y dónde se halla el alma?, ¿en esta luz que nimba las bóvedas vegetales del otoño, que forman estos árboles, en el bosque serrano? Aquí, la misericordia de la luz todo lo hermosea? (José Luis
La niebla difumina el espacio y lo vuelve irreal y tan hermoso, como aquí ocurre con la línea del paisaje y de los árboles, ante el espejo de las aguas? (José Luis Puerto) / Foto de Carlos Santiago
?No habría belleza, ni danza, ni movimiento si las estaciones no alborotaran los colores y el follaje de los arboles no se desprendiera amarillo en el atardecer? (Gioconda Belli) / Foto de Manuel Lamas
vista de la torre de la catredral nueva, desde el patio de escuelas menores
¿Dónde se encuentra la belleza, en la delicada línea de los verdes del paisaje del fondo, en los rebaños de nubes de los cielos, en los pájaros iletrados que se posan sobre el cartel o... en ese aforismo que, sin
LA PROVINCIA DEL ALMA: Puerta lateral de la Iglesia de Miranda del Castañar
Un ángulo nos basta a todos (recordemos el verso de la "Epístola moral a Fabio") para estar en el mundo; un pequeño espacio, un espacio minúsculo, desde el que respirar y latir? (José Luis Puerto) / Foto
?La ciudad no consiste en las casas, los pórticos, ni las plazas públicas: las personas son las que la forman? (Eugenio Espejo) / Foto de Alberto Martín
Foto de Luis Carlos Santiago junto a un puente de Monleras, al lado del embalse de almendra
Melancolía de las ruinas. Sobre esta pared, resto de casa que estuviera habitada y en la que ardiera en el pasado la vida, se posa hoy el ave más humilde? (José Luis Puerto) / Foto de Ángeles Rebollo
escaleras de la clerecía, frente a la casa de las conchas
?Cada loco con su tema, contra gustos no hay ni puede haber disputas, artefactos, bestias, hombres y mujeres, cada uno es como es, cada quién es cada cual y baja las escaleras como quiere? (Joan Manuel Serrat) / Foto de Alex López
Es otoño. Mi barrio albercano de La Puente, donde nací, muestra las rosas del origen, hacia la luz del cosmos? (José Luis Puerto) / Foto de Ángeles Rebollo
Una invitación a visitar la Feria literaria de la plaza mayor en su último día
Al tiempo que larga memoria de la humanidad y arca que contiene el más largo imaginario de nuestra especie, los libros tienen un poder sanador? (José Luis Puerto) / Foto de Luis Carlos Santiago
José Luis Puerto
Vista de la plaza mayor, desde el balcón principal del ayuntamiento
?Nuestra bandera no es un símbolo de un partido político porque ha de serlo de todos; no es un símbolo de la derecha ni de la izquierda porque ha de ondear en todo el espectro ideológico constitucional; no es un
?Es una fiesta para los ojos y para el espíritu, ver la ciudad como poso del cielo en la tierra de las aguas del Tormes? (Miguel de Unamuno) / Foto de Manuel Lamas
imagen captada por pablo de la peña para su trabajo de necrópolis de Salamanca
?Los cementerios salmantinos, que surgen del paisaje de la provincia, se revelan ante el ojo de De la Peña como bellísimos lugares en los que la paz permanece inmutable y la cercanía y la infinitud juegan el contrapicado de la