La rehabilitación de las cubiertas de la Catedral de Ciudad Rodrigo, premiada en los Internacionales de Arquitectura
Obras en la cubierta de la Catedral de Ciudad Rodrigo
Fallados en Sobrado dos Monxes ( A Coruña) dentro de la categoría Gama Clasica
La empresa Tejas Verea y el Colexio Oficial de Arquitectos de Galicia (COAG) entregaron en Sobrado dos Monxes (A Coruña) la segunda edición de los Premios Internacionales de Arquitectura Cubiertas Tejas Verea, un certamen que reconoce proyectos de cubierta inclinada con teja cerámica finalizados entre 2021 y 2024. En esta convocatoria, el interés por la excelencia arquitectónica se hizo notar: el número de candidaturas se duplicó respecto a la edición inaugural, consolidando el galardón como un observatorio de calidad técnica, sensibilidad paisajística e innovación constructiva.
En la categoría Gama Clásica, el jurado otorgó un premio 'ex aequo' a la rehabilitación de la cubierta de la Catedral de Ciudad Rodrigo, firmada por Sánchez Gil Arquitectos. El proyecto preserva la geometría histórica del tejado y, al mismo tiempo, abre un nuevo espacio de contemplación al recuperar la visión de las antiguas cubiertas románicas. Para ello, se combinó la teja “vieja” recuperada con rastreles de madera y teja talón Verea, una solución que mejora las prestaciones del conjunto y reduce su mantenimiento sin alterar su carácter patrimonial.
Otros proyectos distinguidos
En la categoría Gama Eternal, el premio recayó en los Refuxos de Porto Quilmas, en Carnota (A Coruña), obra de Salgado e Liñares Arquitectos. El conjunto, formado por siete cabañas inspiradas en las tradicionales casetas de pescadores, despliega unas cubiertas a dos aguas que dialogan con el horizonte marino. El jurado destacó la cuidada ejecución técnica: instalación en seco sobre rastreles, impermeabilización con lámina transpirable y el uso integral de las piezas especiales de la teja Marsella de la gama Eternal.
El segundo premio 'ex aequo' de la Gama Clásica fue para Villa Carolina, en Cariño (A Coruña), diseñada por Jorge Juan Cao Abad. La vivienda, concebida como villa de recreo y perfectamente integrada en el paisaje rural, se abre hacia la ría de Ortigueira. Su cubierta a dos aguas, entendida como quinta fachada, establece un diálogo equilibrado entre el entorno construido, el paisaje natural y la espacialidad interior que cobija.
Por primera vez, el jurado otorgó además una mención especial a nuevos usos de la teja cerámica, que recayó en el proyecto de señalización del Centro de Hidroterapia Spasinho, en Outes. Diseñado por Ricardo Tubío y Xabier Rilo, de Cenlitros Sociedade Cooperativa Galega, emplea tejas planas como soporte informativo, fijadas mecánicamente y grabadas mediante chorreo de arena, integrando así la cerámica en el paisaje de forma funcional, sobria y expresiva.
Una celebración del oficio y la arquitectura
Los galardones incluyeron dotaciones económicas —3.000 euros para la Gama Eternal y 1.500 euros para cada premiado de la Gama Clásica— y una figura conmemorativa del cabaqueiro, símbolo del oficio tradicional del tejero gallego. La ceremonia, celebrada en la casa rural Abeiro da Loba, contó con la presencia de Luciano González Alfaya, decano del COAG, y otros miembros del jurado. El acto concluyó con un recorrido guiado por los arquitectos responsables de la rehabilitación del espacio, cerrando así una jornada dedicada a la arquitectura como puente entre tradición, técnica y paisaje.
