La lluvia resta público a un emocionante encierro a caballo en Bañobárez

La intensa lluvia presente durante toda la mañana no impidió la celebración de un emocionante encierro a caballo con novillos de José Cruz en Bañobárez, aunque sí restó público, especialmente en la plaza de toros, que finalizó con un albero impracticable para el toreo, por lo que la novillada prevista para esta tarde se aplaza a las 17:00 horas de mañana domingo.

De manera puntual se desarrollaba este primer encierro de las fiestas, en esta ocasión a caballo, aunque con menos caballistas de lo habitual. Los cuatro novillos de José Cruz estuvieron arropados por seis mansos berrendos en colorao y media docena de caballistas, con alguna amazona en el grupo. La carrera discurrió sin más incidentes que el intento de la manada de coger otro camino a la salida de la parcela en lugar del que los dirigía al coso bañoberense, un intento que fue bien controlado por los caballistas.

Ya en la plaza el encierro duró algo más, aunque sin dilatarse en exceso, por lo que unos minutos después se procedía al desencierro de los mansos de regreso a la parcela. Ante el estado de la plaza y la previsión de más lluvias para esta tarde, la novillada se aplaza a las 17:00 horas de mañana domingo, festejo al que seguirá la lidia de los dos novillos previstos para este mismo día en la programación.

Igualmente, como informó el alcalde de Bañobárez, José María Regalado, se mantiene el encierro tradicional previsto para mañana domingo a las 13:00 horas.