Voluntarios de la JMJ dan la bienvenida en las antiguas aduanas a los que entran en Portugal
Les hacen entrega de una bolsa con información turística del país vecino
> Fotos: Adrián Martín
La celebración en Lisboa a partir de este martes de la Jornada Mundial de la Juventud de la Iglesia Católica ha provocado, como ya publicamos hace unos días, que Portugal haya reforzado el control de sus fronteras con el objetivo de “prevenir la entrada de ciudadanos o grupos cuyos comportamientos puedan ser susceptibles de comprometer la seguridad de los ciudadanos nacionales y extranjeros que participarán en el evento”, según señalaron desde el Gobierno luso.
En lo que respecta a la comarca de Ciudad Rodrigo, al menos en la jornada dominical se podía entrar desde la Autovía A-62 con total libertad al país luso (se sabe el momento en que se cambia de país por la preceptiva señal anunciadora de la entrada en Portugal y también por las diferentes tonalidades del alquitrán español y luso).
Mientras tanto, en el antiguo paso fronterizo de Fuentes de Oñoro y Vilar Formoso sí se dejaba sentir el control implantado por la Guardia Nacional Republicana, pidiendo sus agentes la documentación a todos aquellos que entran al país vecino. Al menos en la jornada dominical, justo en ese momento de pedirles la documentación a los que entraban a tierras lusas, voluntarios de la JMJ les hacían entrega de una bolsa con información turística de Portugal.