‘La madre de todas las madres’ procesiona entre las velas en una fresca noche
A la conclusión de la procesión, se pudo disfrutar de un chocolate caliente con bizcochos
Como cada 12 de mayo (excepto los años de la pandemia) desde hace más de tres décadas (la Iglesia del barrio fue erigida canónicamente en 1991), las calles del Valle de San Martín de Ciudad Rodrigo albergaron en la noche del viernes la tradicional procesión de las velas, protagonizada por la Virgen de Fátima en la víspera de la aparición de su festividad en el calendario.
En este sentido, numerosos fieles de distintas parroquias de Ciudad Rodrigo se acercaron con sus velas hasta la Parroquia de Nuestra Señora de Fátima, de donde salió la Virgen en dirección contraria a lo que era tradicional: en vez de bajar hacia la Avenida de Portugal para coger la calle San Martín, este año subió hacia la calle Alfonso IX, para recorrer unos metros de la misma y acabar llegando a la citada calle San Martín.
Como es habitual, se giró hacia la calle Independencia y posteriormente hacia Bailén, mientras diversos fieles se iban turnando a la hora de portar la Virgen, que llevó por delante a los dos mayordomos de este año, Isabel y José Manuel, y por detrás al párroco, Vidal Rodríguez Encinas, quién dirigió el rezo del Santo Rosario intercalado con cánticos. Como en los últimos años, la procesión contó con miembros de la Corporación Municipal, José Manuel Jerez, Davinia Montero y Víctor Gómez, siendo escoltada por agentes de la Policía Local toda la comitiva, que fue abriendo, ‘de paisano’, el sacerdote Fernando Fuentes.
La procesión tuvo como destino la vía de servicio de la Avenida de Portugal, donde la Virgen de Fátima fue colocada en una mesa, acercándose poco a poco todos los asistentes a depositar flores ante la Virgen (esas flores fueron dispuestas por la propia Parroquia). A continuación, se cantó la Salve, y se lanzaron vivas a la Virgen de Fátima y a “la madre de todas las madres”, deseándose asimismo que el año que viene “estemos todos”.
A continuación, la imagen fue devuelta a la Iglesia, donde entraron la práctica totalidad de los fieles para cantar el Himno a la Virgen de Fátima, arrancándose algunas fieles con algún cántico más mientras comenzaba la tradicional ronda de fotos con la imagen de la Virgen. A la salida del templo, todos los presentes pudieron recoger de forma gratuita, para celebrar los 32 años de la Parroquia (como recordó Vidal Rodríguez Encinas), un vaso de chocolate caliente y bizcochos, de los que dieron buena cuenta a las puertas, en una velada fresca (el termómetro marcaba 9ºC) aunque no hacía sensación de frío.
Los actos festivos de la Parroquia de Nuestra Señora de Fátima en honor a la Virgen que le da nombre (que comenzaron la semana pasada con la novena) tendrán su punto culminante este sábado con la celebración de la festividad de la Virgen propiamente dicha, que será por la mañana: a las 12.00 horas tendrá lugar la misa solemne que incluirá los rezos propios de la novena.