El buen comer de Guarda se premia este 2023

La ciudad portuguesa de Guarda ha sido elegida como Destino Gastronómico 2023 por la Revista de Vinhos- Essência do Vinho, una empresa dedicada a la divulgación de la cultura vitivinícola y gastronómica con reconocido prestigio en el país vecino.

Así, Guarda, una ciudad interior de tamaño medio, capital del distrito de su nombre y lindante con Salamanca, ha sido premiada en la categoría Restaurantes, Innovación y Servicio, un galardón que reconoce sus cualidades como destino capaz de dar bien de comer a públicos exigentes.

Son muchas las fortalezas con las que cuenta Guarda para vivir una experiencia gastronómica. Recetas propias de platos salados y dulces, donde no faltan el bacalao, las carnes de la sierra y un postre que resume su historia.

Una ciudad vinculada desde antiguo con el buen comer y el buen beber, razón por la que es visitada por muchos salmantinos, que encuentran en la mesa la mejor excusa para volver a pasear sus calles.

Los vinos de la DO Beira Interior acompañan platos suficientemente sencillos y suficientemente elaborados, características de la cocina portuguesa tradicional que se practica actualmente.

Unos néctares nacidos en un altiplano, en terroirs donde el granito, la pizarra y el cuarzo les proporcionan una buena acidez natural y una elegancia que aumenta su flexibilidad para el maridaje y potencia sus opciones de envejecimiento.

Los vinos DO Beira Interior cada vez están mejor posicionados en el exigente panorama enológico portugués. Con más de cuatro millones de botellas al año, su producción no deja de crecer, sobre todo, en modo ecológico, más fácil de conseguir en estas tierras de altura.

Guarda es la capital más alta de Portugal (1.056 m), puerta de entrada a la Serra da Estrela, por eso su recetario está formado por productos serranos, como las carnes de cordero y cabrito a la brasa, el Queijo da Serra, el cerdo y la ternera o los caldos y sopas. El bacalao es, como en todo el país, un acierto seguro en Guarda.

Bacalhau à Conde da Guarda, el bacalao más espiritual de la ciudad

Guarda ha quedado para siempre unida al bacalao -que aquí se prepara de las mil y una formas que saben los portugueses-, debido a un conde sibarita que tenía muy claro cómo le gustaba este pez en salazón. Se dice que el segundo conde de Guarda pedía siempre que le preparasen el bacalao con una mezcla concreta de ingredientes y un golpe de horno que lo dejaba crujiente por fuera y cremoso por dentro.

Con muchos puntos en común con el Bacalhau Espiritual, el Bacalhau à Conde da Guarda comparte protagonismo con la nata y el puré de patata, con una costra de queso y pan gratinados que le da una apariencia dorada y un interior suave y jugoso.

A caballo entre la leyenda culinaria y la historia de la gastronomía, sobre su origen los maestros de los fogones no se ponen de acuerdo, pero merece la pena probarlo en Guarda y opinar sobre el resultado.

La ternera Jarmelista o el valor de lo escaso

La raza Jarmelista proviene de la aldea de Jarmelo, a pocos kilómetros de Guarda. Es una raza bovina portuguesa autóctona, que rozó la extinción hace tan solo unos años, sin que haya desaparecido aún ese riesgo, aunque va sumando criadores poco a poco, debido a la buena aceptación que esta carne tiene en gastronomía.

Por su pelaje de color dorado, es también conocida como “Vaca Amarela”, tiene constitución fuerte, una carne con poca gordura y sabor suculento, ya que es criada lentamente en extensivo. Se trata de una carne tan apreciada como escasa en el mercado, ya que no se logra cubrir la demanda de raza Jarmelista existente.

La Bola Parda y el Dom Sancho, excusas para una parada dulce

De aspecto oscuro, con huevos, mantequilla, harina, aguardiente y canela en dosis generosa, la Bola Parda es un bizcocho tierno que veremos en los escaparates de las pastelerías de Guarda. Procedente de las tradiciones culinarias navideñas, ahora se elabora en cualquier época.

El Dom Sancho es un pastel que se creó hace unos años, basándose en la relación de la ciudad con el rey Sancho I, el rey-poeta que fundó la urbe y al que Guarda inspiró muchas de sus Cantigas de Amigo. Está hecho con hojaldre de centeno relleno de crema de huevos con un toque de queso de la sierra, y es verdaderamente fino y delicioso.

Guarda es el destino donde ya nos esperan platos suculentos, vinos elegantes y el ambiente generado por el buen recibir portugués.