Ambiente festivo en la Matanza Tradicional en Lumbrales
Niños y mayores disfrutraron en una agradable mañana, en la que se realizaron todas las tareas habituales de una jornada matancera
La Plaza Mayor de Lumbrales se ha convertido esta mañana en escenario de la Fiesta de la Matanza Tradicional, una celebración que ha permitido evocar a los mayores y mostrar a los niños una de las tareas más típicas del invierno en el medio rural.
La mañana se iniciaba con frío, aunque el sol no tardó en caldear el ambiente. El sol y el desayuno típico (aguardiente y mantecados y perronillas tradicionales de Lumbrales) que se ofreció a todos los asistentes a partir de las 10 horas de la mañana.
El Maestro de Ceremonias, en presencia del alcalde, Carlos Pedraz y los concejales Rosa del Pozo y Jesús Herrero, dio por empezada la fiesta con el toque de corneta y la recepción del cerdo, un hermoso ejemplar de más de 14 arrobas que fue traído ya sacrificado a la plaza.
Depositado en el suelo, cerca de la fogata, se procedió al chamuscado tradicional, cubriendo al animal con paja y retirando lo quemado con palas. A continuación se procedió al despiece del animal, tarea en la que participaron un grupo de vecinos voluntarios. Pancetas, lomos y demás piezas fueron colgadas en los típicos varales.
Algunas de estas carnes fueron asadas para después ser catadas por el público presente.
El proceso tradicional de la matanza se completó con el picado y enfoscado de las carnes, tareas realizadas también por vecinos que colaboraron voluntariamente en esta actividad, promovida por el Ayuntamiento de Lumbrales, e incluida en el circuito de la Fiesta de la Matanza Tradicional de la Diputación de Salamanca.
Música, baile y chascarrillos
Además del trabajo que conlleva el proceso de despiezado y elaboración de las productos del cerdo, en una matanza típica no podía faltar la fiesta: música y baile, canciones y chascarrillos han estado presentes esta mañana en la Plaza Mayor de Lumbrales.
Así, al son de la gaita y el tamboril, tocados por el tamborilero local Javier Fraile, un grupo de niñas se animó a bailar charradas, acompañadas por las concejalas Rosa del Pozo y Esther Santiago. Niños y no tan niños disfrutaron también escuchando al Maestro de Ceremonias que animó la mañana con chascarrillos e historias relacionadas con la matanza.
Al mediodia se clausuraba la Fiesta de la Matanza en Lumbrales, una celebración que se ha desarrollado "en un buen ambiente festivo, con un tiempo que ha acompañado y gracias a la colaboración de vecinos del pueblo" descataban los miembros de la Corporación Municipal al finalizar la jornada.