Los camposantos recuperan la normalidad clásica del Día de Todos los Santos

Los cementerios de la comarca de Ciudad Rodrigo están volviendo este año a la normalidad tradicional del Día de Todos los Santos después de que el año pasado la pandemia del coronavirus también alterase por completo esta jornada, empezando por el hecho de que estaba vigente la prohibición de entrar o salir de la mayoría de las comunidades autónomas españolas, lo que hizo que muchas personas originarias de la comarca que viven fuera de Castilla y León no pudieran cumplir con la tradición de acercarse a recordar a sus difuntos.

Este año, sin ninguna restricción de movilidad, los camposantos están registrando la afluencia habitual de un 1 de noviembre, favorecida por el hecho de que este año la festividad ha caído en lunes, por lo que se ha podido enlazar con el fin de semana. Además, tras las lluvias de los últimos días, el lunes está deparando un cielo mucho más calmado, luciendo el sol prácticamente durante toda la jornada, acompañado de una aceptable temperatura (aunque el viento la redujo en algunos tramos).

Así, mirobrigenses y comarcanos se están acercando con tranquilidad a los cementerios, donde están pudiendo permanecer todo el tiempo que deseen, ya que este año tampoco hay límite de aforo ni de tiempo como sí hubo el año pasado (en el Cementerio de Ciudad Rodrigo, un máximo de 200 personas a la vez, pudiendo permanecer cada una de ellas un máximo de 30 minutos). De este modo, en el camposanto mirobrigense, como es habitual en los días de Todos los Santos 'normales', varias familias de etnia gitana están pasando la jornada entera en el lugar recordando a sus difuntos.

En esas visitas a los cementerios también se están llevando las habituales flores para colocar en nichos y sepulturas, si es que no habían sido colocadas ya en los días previos. Por ejemplo, el Cementerio mirobrigense ha tenido un horario ampliado la segunda quincena de octubre para facilitar esos preparativos. Dentro de la reglamentación para estos días, este lunes vuelve a estar prohibido como todos los años la circulación y el aparcamiento de vehículos en las puertas del camposanto, congregándose los vehículos principalmente en la larga avenida que lleva hasta el Centro de Salud y Especialidades.

La jornada del 1 de noviembre en el Cementerio de Ciudad Rodrigo se está completando a la hora de publicarse esta información (a las 16.30 horas) con una eucaristía en su Iglesia en memoria de Todos los Difuntos de la Diócesis Civitatense presidida por el Administrador Apostólico de la misma, Jesús García Burillo, quién durante la mañana presidió otra celebración en la Catedral, igualmente con motivo del Día de Todos los Santos. Para completar estos días, Jesús García Burillo se encargará este martes en la Seo de la Conmemoración de los Fieles Difuntos (a las 11.00 horas).