Verano y otoño se dan la mano en los fosos con botellas y setas

Aunque no es masivo, los fosos de Ciudad Rodrigo, en el tramo comprendido entre las Puertas de Amayuelas y la Puerta de San Vicente, acogen estos días una pequeña 'fusión' entre las estaciones del verano y del otoño. En lo que respecta a la época estival, aún se conservan por el lugar algunos restos de las fiestas veraniegas, con botellas y latas de bebida.

A ras de contrafoso, apenas quedan restos (3-4 botellas sueltas, tanto de agua como de alcohol), pero sí son bastante notables en el conocido como Revellín del Calvario, al que se sube por una escalera de piedra (de pasos estrechos), tras llegar al lugar por la doble escalera metálica de la zona conocida como 'La Uve' (o bien recorriendo todo el contrafoso desde la Puerta de San Vicente).

En ese Revellín (al final de la galería hay una imagen donde se aprecia íntegro) hay varias botellas y latas, algunas incluso destrozadas, y la mayoría hundidas o semihundidas en el terreno, ya casi ocultas por el verde. Mientras, en lo que se respecta al espíritu otoñal de los fosos, en estos días se puede ver cómo han crecido en la zona varias setas, con el verde en todo su esplendor.