Añoranza de Martes Mayor en una jornada de bastante ajetreo en Miróbriga

Por segundo año consecutivo, la pandemia del coronavirus ha dejado a Ciudad Rodrigo sin uno de sus grandes momentos del verano (y de cada año): la fiesta del Martes Mayor, que en un año normal supone la salida a la vía pública de infinidad de puestos comerciales, así como de barras de hostelería, para vivir un día puramente callejero, que en los últimos años viene incluyendo varias actividades musicales en los tramos de tarde y noche de la jornada.

Ante la imposibilidad de llevar a cabo el Martes Mayor propiamente dicho ante las aglomeraciones que se generan, el Ayuntamiento de Ciudad Rodrigo intentó 'sustituirlo' (así como al Martes Chico) con una 'Jornada Comercial de Martes' que quería conservar parte del espíritu de la festividad original, en concreto de su parte comercial, con el despliegue por las calles de los puestos comerciales que quisieran.

Aunque se llegó a publicar un listado de puestos inscritos para esta Jornada Comercial de Martes, 48, que tenían que haberse repartido por los lugares de desarrollo del Martes Mayor y del Martes Chico, es decir, por el centro histórico y el entorno del Parque de La Glorieta, finalmente el Ayuntamiento canceló la semana pasada esta festividad alternativa por el aumento de los casos de coronavirus de la ciudad, después de que la Junta desaconsejase su celebración.

De este modo, Ciudad Rodrigo ha vuelto a vivir un segundo martes de agosto totalmente atípico ya que, aunque no hubiera ninguna festividad, el ajetreo en las calles mirobrigenses fue notable como corresponde a las fechas en las que nos encontramos en las cuales vuelven a la comarca numerosas personas originarias de la misma que ahora viven bastante lejos de la misma. Junto a ellos, también hubo unos cuantos turistas, como se pudo comprobar en la asistencia a la visita guiada que partió al mediodía de los soportales del Ayuntamiento.

Así, los establecimientos de hostelería ?sobre todo aquellos con terraza- tuvieron un buen movimiento, que también se notó en el ámbito comercial, destacando en este apartado la Plazuela del Buen Alcalde, que tuvo un aspecto 'similar' al de un Martes Mayor, ya que una semana más estuvieron los puestos de frutas y verduras de las riberas del Águeda a los que se sumaron unos cuantos puestos de artesanía (algo que viene ocurriendo durante los martes veraniegos).