El alcalde de Bocacara recomienda el confinamiento de sus vecinos tras un presunto brote de...
Se trata al parecer de una familia que vino del norte a pasar unos días al pueblo
Un posible brote de COVID-19 trae de cabeza a los vecinos de la pedanía mirobrigense de Bocacara después de que el test realizado a una familia residente en el País Vasco hubiera pasado unos días vacacionales en dicha localidad diera positivo.
El alcalde pedáneo Gregorio Rodríguez ha recomendado a sus vecinos el confinamiento inmediato para poner barrera a más propagación del virus y ha procedido al cierre de las piscinas municipales y parques públicos.
Al parecer se trata de una familia de siete integrantes, de los que seis dieron positivo en las primeras pruebas sanitarias y que ya podrían haber venido infectados de su localidad de residencia. Las pruebas PCR no podrán llevarse a acabo hasta el 27 y 31 de agosto para las personas que estuvieron en contacto con esta familia, con lo cual el primer edil de la localidad mirobrigense ha recomendado aislamiento para todos los vecinos.
En la actualidad el censo de Bocacara es de unas 150 personas, pero hay que recordar que durante este mes vacacional la población crece considerablemente.
Según el popular Gregorio Rodríguez, la preocupación en la pequeña pedanía es grande, pues varios miembros de la familia que llegó desde San Sebastián, estuvieron en el bar y varios establecimientos públicos sin mascarilla a pesar de las recriminaciones de los vecinos lugareños, haciendo caso omiso a ponerse protección.
En declaraciones de Rodríguez a Ciudad Rodrigo al día, un familiar mayor que fue operado recientemente en el hospital donostiarra, al regresar de las vacaciones y hacerse una revisión médica, le fue detectado el virus haciendo pruebas a los familiares cercanos con los que convive de los que seis de los siete que estuvieron en Bocacara han dado positivo, habiendo entre ellos jóvenes y mayores que alternaron libremente durante el pasado fin de semana en Bocacara.