El gol se resiste a Ciudad Rodrigo y Onzonilla tanto en la fase de control como en la de descontrol ...

Tras dos semanas jugando fuera de casa con buenos resultados (una victoria y un empate ?tras escaparse el triunfo en el 94'-), el equipo Senior del Ciudad Rodrigo CF regresó en la jornada del domingo al Francisco Mateos para un duelo por todo lo alto, ya que se medían al Onzonilla, el otro equipo que había acumulado 7 puntos en los 3 primeros encuentros, por detrás de los 9 del Villa de Simancas, que en la mañana dominical logró su cuarto triunfo para totalizar ya 12.

Este duelo entre mirobrigenses y leoneses se disputó en una novedosa franja horaria, las 19.00 horas, lo que hizo que se empezase a jugar con pleno sol y se acabase con la noche ya cayendo en Ciudad Rodrigo (por fortuna, hacía un gran día, con lo cual la temperatura fue agradable en todo momento).

Ese cambio que fue haciendo el cielo pasando del día a la noche lo hizo también el partido, que vivió varias fases muy diferenciadas, pasándose del amplio control que tuvo el Ciudad Rodrigo en la primera parte a un segundo tiempo más igualado, y que se fue alocando, viviéndose unos minutos finales muy agitados (con los jugadores mirobrigenses ciertamente 'acelerados' y el público cada vez más excitado).

Ambos equipos tuvieron sus intentonas de gol, y aunque en el global, el Ciudad Rodrigo pudo llegar a rematar más veces, lo cierto es que estuvo un poco más cerca del gol el Onzonilla, que incluso estrelló un balón en el palo en la enrevesada última jugada de la primera parte. A la hora de librarse del gol en contra, destaca el gran trabajo defensivo mirobrigense, desbaratando un buen número de llegadas muy peligrosas del Onzonilla.

Finalmente, sin goles que echarse a la boca, mirobrigenses y leoneses acabaron firmando un empate que no se puede calificar de injusto por lo visto en el global del encuentro. En lo que respecta al Ciudad Rodrigo, se trata del segundo partido consecutivo que deja su portería a 0 (lleva sólo 2 tantos encajados en 360 minutos, siendo el mejor de la categoría en este apartado).

La semana que viene, el Ciudad Rodrigo vivirá su primer derby del curso, frente al Hergar Camelot Helmántica, que los mirobrigenses jugarán en la misma franja horaria: las 19.00 horas del domingo. A la semana siguiente, seguirán las emociones fuertes, ya que visitará el Francisco Mateos el equipo que está firmando el arranque de liga perfecto, el Villa de Simancas.

Tras unos cinco minutos iniciales de tanteo, el Ciudad Rodrigo asumió las riendas del partido, fabricando algún primer remate, como uno de cabeza en el 6' de Javi Moríñigo a un saque de esquina de Alberto García que despejó un defensa en el primer palo; un disparo en el 11' de Alberto García tras una buena combinación en la que habían participado Risueño y Marcial que se marchó desviado; y otro tiro en el 13' de Manu Blanco dentro del área que atrapó el guardameta.

En torno al 15', el Onzonilla llegó al partido, aunque en la primera parte apenas tuvo control real del balón en momentos muy puntuales. En ese minuto tuvo su primera ocasión: una falta en el lateral izquierdo del área (casi en línea de fondo), que pusieron en juego de estrategia, que fue desbaratada por la defensa mirobrigense. De los minutos siguientes, se puede destacar un despeje en el 18' del portero que impactó en Marcial, yendo el balón fuera como bien pudo ir a su portería; y un buen centro de Lafu desde la izquierda en el 24' que no llegó nadie a rematar.

Como decíamos más arriba, el Onzonilla lo probó menos, pero con más peligro, como por ejemplo en el 27', con un balón desde atrás que atrapó en 3/4 de campo un jugador que se fue hacia el área, donde sacó un tiro cruzado que se marchó rozando el palo. Unos minutos después, en el 38', hubo otra jugada de inicio 'similar', aunque en este caso hubo un recorte en el área antes de realizar un tiro que por fortuna para el Ciudad Rodrigo salió alto.

Entre medias, en el 30', el Ciudad Rodrigo hizo su disparo a puerta más potente de la primera parte: un lanzamiento de falta de Marcial que despejó el guardameta. El tramo final de este primer período fue un poco más igualado (los mirobrigenses cedieron dominio), aunque hubo dos ocasiones locales: un buen remate de cabeza de Manu Blanco a un balón colgado por Héctor que se marchó fuera; y un disparo en 2ª opción de Sergi que se perdió por encima del larguero. La primera parte se cerró con una jugada muy enrevesada en el área del Ciudad Rodrigo que culminó con un disparo visitante que se estrelló en el palo.

Al poco de volver de vestuarios, con las luces del campo ya encendidas, se vio que el partido había cambiado, contándose con más idas y venidas, y menos orden, generándose un ramillete de ocasiones para ambos. En el caso del Onzonilla, fue sobre todo con balones en largo y acciones rápidas a la contra, que provocaron un sobresfuerzo a la defensa mirobrigense, integrada por Héctor, Pablo, David Risueño y Adrián Gallego, quién por ejemplo cortó en el 51' un balón muy peligroso. En los minutos siguientes hubo otras acciones con peligro en el 59', 62', 64' o 75', evitándose siempre el tiro a puerta.

La del 62' fue una contra desde el área del Onzonilla tras un disparo de Alberto García que repelió el portero. Previamente, en el 53', había habido un remate de cabeza de Pablo a un saque de esquina que un defensa despejó casi sin proponérselo, mientras que en el 62' hubo una gran contra local que culminó con un gol de Marcial que fue anulado por fuera de juego. En el ecuador de esta segunda parte, en pleno carrusel de cambios, el partido fue perdiendo aún más claridad, viviéndose unos minutos de poco peligro (por parte local, Maza botó en el 74' una falta en 3/4 de campo que se perdió alta).

La opción más clara del Ciudad Rodrigo en el 2º tiempo llegó en el 77': un remate a bocajarro de cabeza de Héctor solo en el 2º palo, que el portero estuvo atento para enviar por alto a córner. Tres minutos después, hubo otra llegada muy peligrosa al área mirobrigense que de nuevo la defensa logró despejar. Aunque el Onzonilla siguió llegando al área rival en lo que quedaba de partido, ese fue el último gran momento de peligro real.

En los minutos finales, fueron los locales los que llevaron la batuta, acelerándose incluso demasiado en busca del gol. Como primera opción del bloque final, Javi Moríñigo lo probó con un tiro raso que se fue rozando el palo izquierdo. En el 88', Alberto García estuvo a punto de marcar con un balón bombeado casi sin ángulo que acabó en córner, dando pie a tres saques de esquina consecutivos que estuvieron acompañados de mucha sensación de peligro, pero sin tiros entre los tres palos (por ejemplo, el Onzonilla un pase de la muerte de Edu Sánchez). Ya en el 94', el Ciudad Rodrigo se plantó por última vez arriba, pero ni siquiera disparó con lo que el encuentro se cerró con 'gafas'.