Esta tarde novillada con los alumnos de la Escuela de Tauromaquia de Salamanca, Valentín Hoyos y Juan Marciel
Hacía tiempo que los encierros de Villarino resultaban de lo más apacible, hasta el de hoy, novillos de Valrubio, bien presentados y con su fuerte carácter. El caso es que vista la velocidad de la carrera en la Avenida de San Amaro todo apuntaba a que la manada llegaría sin incidencias al coso villarinense. Nada más lejos de la realidad.
En mitad de la calle La Cumbre, casi a la altura de Carrasquina, uno de los novillos de Valrubio arremetía contra una valla y un segundo después se giraba para entrar en una vivienda con la puerta en el recorrido. Y como la valentía de este ganado no tiene límites, el eral no solo embistió contra la puerta, sino que entró en la vivienda para destrozar su interior y herir en una mano a su propietario, que fue atendido por los servicios de urgencia del centro de guardias de la localidad y posteriormente trasladado al Complejo Hospitalario de Salamanca para una mejor exploración de la herida, un corte.
Así las cosas, al margen de un herido y de una casa destrozada por dentro, 'no hubo más incidentes', la manada se partía en dos y los dos novillos negros se quedaban rezagados atendiendo en la Cumbre los cites de los aficionados, aunque poco después entraron en la plaza sin más incidencias y dispuestos para su lidia esta tarde por los alumnos de la Escuela de Tauromaquia de Salamanca, Valentin Hoyos y Juan Marciel, festejo que dará comienzo a las seis y media de la tarde.
El programa festivo continuará con una actuación musical en el Sagrado y una verbena con la orquesta La Huella.
EN UNOS MINUTOS SE INCLUIRÁ UN VÍDEO DEL ENCIERRO
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Actuación musical con el 'Duo Arys' en el sagrado.