La gran aglomeración de público provoca problemas en la carpa, dejando incluso una joven herida

La gran cantidad de público que había durante la noche del sábado en Ciudad Rodrigo, unos cuantos de ellos jóvenes que habían llegado expresamente a la ciudad para pasar una única noche y marcharse a primera hora de la mañana dominical, acabó generando unos cuantos problemas. Al menos hasta la hora de publicarse esta información, las 5 de la mañana, los incidentes más graves tuvieron lugar en la carpa situada en el Paseo Fernando Arrabal.

Pasadas las 2 de la mañana, con la carpa totalmente llena (el aforo máximo permitido son 1.700 personas), a las puertas de la misma seguía llegando gente queriendo acceder al interior ?aunque había una buena noche para seguir la música desde fuera- y encontrándose con la negativa de los guardias de seguridad de la instalación.

Ante esa situación, algunas personas, ni cortas ni perezosas, decidieron rajar las lonas de otros puntos de la carpa para acceder al interior, siendo imposible de controlar la situación por los guardias de seguridad, por lo que se dio aviso a la Guardia Civil y a la Policía Local, quienes desplegaron numerosos efectivos en tan solo unos minutos.

Aunque tardaron poco en llegar, la situación se complicó en ese intervalo de tiempo, con los guardias de seguridad empleando incluso sus porras para intentar controlar al público, como se puede ver en el vídeo que aparece más abajo, grabado por una de las personas que estaba en el interior de la carpa, que denuncia los malos modos empleados por esos guardias.

Dentro de estos intentos para acceder al interior, se produjo incluso una pequeña avalancha a la entrada en la cual se cayó al suelo una chica que fue pisada por otras cuantas personas, teniendo que acudir hasta el lugar de los hechos una ambulancia que la evacuó del lugar por fortuna únicamente con un esguince y varias contusiones.

La situación provocó el cierre (al menos momentáneo) de la carpa durante la noche del Sábado, siendo desalojadas todas las personas que había en el interior (la Guardia Civil estimó que se sobrepasaba el aforo, opinión que no era compartida por los propios responsables de la carpa).

Por cierto, que no acababa de marcharse la ambulancia del lugar donde había aparcado (el Registro), cuando justo en el otro lateral de la carpa estuvo a punto de producirse otro incidente de relevancia, cuando un joven que estaba con unos amigos sentado en el borde de la zona ajardinada del Paseo Fernando Arrabal cayó hacia el foso. Por fortuna, parece que no sufrió ningún daño de relevancia.