Descubre en Salamanca RTV Al Día qué conocimientos, habilidades y actitudes debes reunir para ser un buen diseñador web. Anticipo: no basta con tener ganas.
Impartir cursos de Diseño Web te hace reflexionar sobre las características que definen a un buen profesional que se quiera dedicar a diseñar páginas web. ¿Puede hacer la web de tu empresa tu sobrino, que es muy hábil con el PC (y la videoconsola)?
Con el tiempo, el oficio de diseñador de páginas web ha pasado de estar enfocado en el diseño gráfico a estar más centrado en la programación, o al menos, en el dominio de lenguajes de descripción de páginas (HTML) y formatos visuales (CSS).
Recuerdo que hace un par de décadas impartí cursos de diseño web para la Fundación Germán Sánchez Rupérez, en las que, para facilitar a los adolescentes la creación de sus propios sitios web, usábamos el procesador de textos Word como programa de edición web. En esas fechas, el CSS no entraba en mi lista de abreviaturas conocidas, y enseñar a chavales el lenguaje HTML no resultaba muy didáctico.
En esos tiempos, hacer páginas con Word, FrontPage, Netscape Composer y otros editores WYSIWYG era bastante parecido a crear un documento de texto, sólo que añadíamos enlaces a otros documentos, y eso sí, había que optimizar las imágenes.
Sin embargo, para crear páginas web profesionales, hay que tener una visión más completa, considerar el sitio web en conjunto, y no sólo cada página web por separado. No es posible crear páginas aplicando conceptos de usabilidad y accesibilidad, y añadir o modificar posteriormente contenidos y nuevas páginas, si no hemos creado una estructura sólida, bien construida y respetando las buenas prácticas y los estándares establecidos.
Sin duda, un diseñador gráfico con talento podrá crear atractivos diseños de pantalla para sitios web, pero si desea realizar él mismo todo el proceso, necesita aprender las otras habilidades que hemos citado. O contar con un buen programador web a su lado.
Un diseñador gráfico, acostumbrado a crear materiales para imprimir, lo que implica tamaños específicos como DIN A4, A5 u otros, puede tener problemas para acostumbrarse al diseño responsive, en el cual la maquetación no es fija, sino fluida, y depende del ancho de la pantalla (no en pulgadas, sino en píxeles = resolución).
Hoy en día, no se navega desde un único dispositivo: ordenadores de sobremesa, portátiles, videoconsolas, smart TVs, tabletas, móviles y eBooks permiten acceder a páginas web, con tamaños de pantalla y resoluciones muy diferentes, algunos además en orientación horizontal o vertical.
En realidad, el mismo concepto de diseño fluido, adaptativo (responsive) es difícil de asumir, y decidir cómo deben mostrarse los contenidos de cada página en los diferentes tamaños de pantalla y dispositivos no es tarea sencilla.
Como apuntábamos antes, se requiere tener una mentalidad analítica y sistemática para crear sitios web de forma profesional. Eso no quiere decir que la creatividad, la iniciativa y el talento no sean importantes, pero no bastan para dedicarse a esta profesión en serio.
El diseño web requiere mantener la atención en muchas y diversas variables a la vez, y saber planificarse y organizarse es imprescindible para llevar una tarea a buen puerto.
A diferencia de otras profesiones, el diseño de un sitio web requiere el manejo coordinado de multitud de archivos informáticos (imágenes, archivos HTML, CSS, JavaScript, videos), que deberemos almacenar y gestionar en una estructura de carpetas. Si cambiamos el nombre de un archivo, o lo movemos a otra carpeta, los enlaces dejarán de funcionar.
Para realizar un sitio web, además de los programas de retoque fotográfico y edición de páginas web, necesitamos dominar varios lenguajes, comenzando por HTML y CSS, cada uno con su propia sintaxis y posibilidades, todo ello en inglés, por supuesto.
Los programas de edición web WYSIWYG como Adobe DreamWeaver facilitan mucho el trabajo, pero en muchas ocasiones es imprescindible modificar manualmente el código fuente HTML, CSS o JavaScript.
Para crear páginas web dinámicas (que permitan crear y modificar sus contenidos "en directo"), como los sitios web autogestionables, además, debemos dominar un lenguaje de programación de servidor como PHP, y un lenguaje de bases de datos como SQL.
Más información sobre lenguajes y tecnologías en: siglas más usadas en Diseño Web.
Es difícil que un solo técnico, por muy profesional que sea, pueda ser experto en varias disciplinas, especialmente si todas ellas están renovándose continuamente con nuevas tecnologías, tendencias, y procesos productivos.
A menudo, un equipo de diseño web constará al menos de un programador informático, un diseñador gráfico y un experto en SEO y marketing online. Ese grupo profesional aportará una visión de 360º que aportará a cada proyecto la mezcla necesaria de creatividad, programación y enfoque comercial que necesita para desarrollarse con éxito.
La presencia de tales técnicos asegura que ninguna parte del proceso quedará coja, y podrán obtenerse resultados óptimos.
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Fernando Sánchez Gómez
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