VÍDEO Y FOTOS | Salamanca se tiñe de morado en un clamor masivo contra la impunidad de la violencia machista

Una multitudinaria marea morada ha tomado esta tarde las calles de Salamanca para alzar la voz, un año más, contra la violencia de género. Convocada por el Movimiento Feminista de Salamanca, la manifestación ha reunido a personas de todas las edades en una jornada reivindicativa que ha teñido de violeta el eje comercial y social de la capital del Tormes bajo el lema 'El machismo nos cuesta la vida'.

La movilización ha comenzado a fraguarse a las 19:00 horas en la Plaza de la Concordia, donde se ha llevado a cabo un taller de pancartas previo a la marcha. Pese a las bajas temperaturas propias de finales de noviembre, el ambiente ha sido combativo y unitario. Abuelas, madres y nietas, acompañadas por numerosos hombres, han compartido espacio y consignas, demostrando que la lucha contra las violencias machistas es una cuestión transversal que interpela a toda la sociedad salmantina.

Alrededor de las 19:30 horas, la cabecera ha iniciado su recorrido. La manifestación ha descendido por la avenida de María Auxiliadora, ocupando la calzada con una larga columna de manifestantes que portaban carteles y coreaban lemas exigiendo seguridad y justicia. "No estamos solas, no nos callaremos más", ha sido uno de los mensajes repetidos a lo largo del trayecto, que ha continuado por la calle Toro hasta desembocar en el ágora salmantina.

Denuncia de la violencia institucional

A su llegada a la Plaza Mayor, el corazón de la ciudad se ha convertido en el escenario final de la protesta. Allí se ha procedido a la lectura del manifiesto, un texto duro y directo que ha puesto el foco no solo en los agresores particulares, sino también en la responsabilidad del Estado. El Movimiento Feminista ha denunciado que "las casas siguen siendo un lugar inseguro" y ha recordado la escalofriante cifra de 82 mujeres asesinadas este año por sus parejas o exparejas.

Durante la lectura, se ha hecho especial hincapié en la existencia de una "justicia patriarcal" y se ha exigido la implementación de una verdadera justicia feminista que erradique la violencia institucional. El comunicado ha recordado que la violencia no se limita a las agresiones físicas, sino que se extiende a los ámbitos políticos, mediáticos y judiciales, afectando con mayor crudeza a las mujeres migrantes, racializadas y en situación de pobreza.

El acto ha concluido con un llamamiento a romper el silencio y la complicidad, recordando también a las mujeres palestinas y exigiendo una educación sexual integral como motor de cambio social para que las futuras generaciones crezcan libres de machismo.

">

Manifiesto íntegro del Movimiento Feminista de Salamanca

A continuación, reproducimos el comunicado leído por la organización al finalizar la marcha:

Este 25 de noviembre, Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres, nos volvemos a encontrar en las calles, para denunciar que las mujeres y disidencias siguen sufriendo violencia en sus casas, en las calles, en las redes sociales, en los medios de comunicación, en la política, en las instituciones…

Volvemos a salir a las calles para recordar que, gracias a la Lucha Feminista, hemos avanzado en Derechos. Y que, gracias a la lucha feminista, resistimos las violencias. No estamos solas, no nos callaremos más. Estamos aquí para acompañar, denunciar y exigir respuestas.

Que quede claro que la Violencia son los actos perpetrados contra las mujeres por particulares. Pero también son violencia todas las acciones y las omisiones donde el Estado y las administraciones de turno son responsables.

HOY QUEREMOS RECORDAR:

QUE LAS CASAS SIGUEN SIENDO UN LUGAR INSEGURO PARA MUCHAS MUJERES E INFANCIAS

82 mujeres fueron asesinadas este año por sus parejas o exparejas. Y todavía tenemos que aguantar que el alcalde de Alpedrete defienda la bondad del asesino. La precariedad de las políticas de prevención y protección tienen responsabilidad en estas muertes.

Las mujeres seguimos sufriendo violaciones, acoso sexual, abusos sexuales intrafamiliares. Y siempre los agresores son varones. Hay que seguir cuestionando los mandatos de género.

Sigue habiendo desigualdad, y la mayor desigualdad la sufren las mujeres migrantes, racializadas, con discapacidad, las mujeres pobres, las mujeres trans… Volvemos a gritar: ninguna persona es ilegal.

La violencia contra mujeres madres es violencia directa contra la infancia. Ningún agresor es un buen padre.

Estamos hartas de ver que los violentos siguen impunes, porque existe una Justicia patriarcal que persigue madres protectoras y arranca a niños y niñas para entregarlos a agresores y abusadores.

Toda nuestra solidaridad con Juana Rivas, Gabriel, Daniel y quienes al día de hoy sufren la violencia institucional de Género. Esperamos que estos "fallos" judiciales se reviertan pronto.

Denunciamos la complicidad de un sistema político, que no prioriza la protección de la mitad de la población, y consiente que trabajadoras y trabajadores públicos de la justicia, violenten a las mujeres, en vez de proteger sus derechos.

• Exigimos formación especializada y servicios para todas las mujeres, niñas, niños y adolescentes.
• Exigimos una Justicia Feminista para erradicar las prácticas de violencia institucional que sostienen la violencia vicaria.
• El Pacto contra la violencia machista debe incluir acciones claras, para proteger a las mujeres de la violencia generada por agentes estatales.

DENUNCIAMOS QUE EXISTEN SERVICIOS PRECARIOS Y DERECHOS QUE DEPENDEN DE VOLUNTADES POLÍTICAS

Las mujeres hemos luchado por el derecho al aborto, pero seguimos atadas a las voluntades de cada administración de turno. Tenemos derecho a decidir sobre nuestros cuerpos y nuestra maternidad.

Exigimos que el derecho al aborto esté garantizado en la Constitución y queremos una sanidad pública sin excepciones, de calidad, y que nos atienda de manera integral en todas nuestras singularidades.

Nos solidarizamos con las mujeres de Andalucía, que sufren la precarización de la atención en la salud. Los desmantelamientos de servicios ponen en riesgo la vida de las mujeres. ¡Basta ya de la privatización de la sanidad pública!

RECORDAMOS QUE MUCHAS MUJERES FUERON VÍCTIMAS DE VIOLENCIA EN LOS PATRONATOS DE LA MUJER DURANTE LA DICTADURA FRANQUISTA

Exigimos verdad, justicia y reparación. Exigimos que se den garantías para que no pueda volver a repetirse, investigando las prácticas actuales de las instituciones que gestionan fondos públicos.

QUEREMOS RECORDAR QUE LOS DISCURSOS DE ODIO y la Violencia Política AMENAZAN LAS VIDAS de mujeres Y LA CONVIVENCIA DEMOCRÁTICA.

Los políticos no pueden incentivar el odio, y la Justicia debe investigar y sancionar los delitos para cuidar la convivencia democrática, el periodismo crítico feminista y la vida de las mujeres.

Toda nuestra solidaridad con nuestra compañera Sara Santaolalla, con Cristina Fallarás, Laura Arroyo y todas aquellas mujeres que hacen un trabajo profesional y luchan por la justicia para todas las personas.

• Exigimos que se investiguen responsables y se garantice la protección.
• Exigimos Formación y Justicia Feminista para todas las personas que en sus casas, en las calles, en el Parlamento o en la Justicia, alienten el odio y violenten mujeres.
• La impunidad perpetúa la violencia.

QUEREMOS RECORDAR LA IMPORTANCIA DE LA EDUCACIÓN COMO MOTOR DEL CAMBIO SOCIAL.

Queremos una política educativa que atraviese el sistema público y privado. Queremos una educación sexual integral, en derechos humanos, género y disidencias. Queremos una educación libre de machismo, racismo y xenofobia, para que los espacios educativos sean espacios seguros que promuevan el cambio y la justicia social.

Para terminar

Queremos recordar a todo el Pueblo Palestino, víctima de un genocidio, y en especial a las mujeres, que sufren el peor de los horrores contra sus cuerpos, afectos, cultura y hogares.

Basta de silencio, de complicidad, de impunidad. La violencia se cobra la vida de mujeres. Salgamos a las calles, acompañemos a mujeres, denunciemos, exijamos.

¡Viva la lucha feminista!

VÍDEO Y FOTOS: TONI SÁNCHEZ