Jorge Blázquez, el canterano que lidera al Piensos Durán Albense
Su liderazgo en la pista, su carácter competitivo y un formidable disparo le han erigido como un referente para la cantera y la afición de Alba de Tormes
El Pabellón Municipal de Alba de Tormes tiene en Jorge Blázquez a uno de sus grandes referentes. Tras meditar su continuidad durante este verano, el jugador albense no solo está cuajando una temporada excepcional, sino que personifica como pocos el sentimiento de pertenencia y la identidad de un club al que ha estado ligado desde niño. Esta es su décima temporada en el primer equipo y la decimoséptima en el club. Su figura en la pista es la de un líder que aúna carácter, lucha y un disparo demoledor.
La historia de Jorge Blázquez con el Piensos Durán Albense es sinónimo de fidelidad, es un "jugador de la casa". Ver a Jorge liderar al primer equipo en partidos como el de ayer es la confirmación de que el talento y el trabajo desarrollados hace años en la cantera tienen su recompensa, un mensaje fundamental para el futuro del club.
Ese largo camino le ha permitido comprender a la perfección la filosofía del club y lo que significa defender su escudo ante la afición. No es solo un jugador más; es parte del patrimonio del Piensos Durán Albense, un deportista que siente los colores como propios porque, literalmente, ha crecido con ellos.
Carácter y un disparo temido
Si hay tres características que definen a Jorge Blázquez en la pista, son su carácter competitivo, su potente disparo y la capacidad de sacrificio. Es un jugador que nunca da un balón por perdido, cuya intensidad contagia a sus compañeros y eleva el nivel de exigencia del equipo. Su presencia en el campo es sinónimo de mando y organización, un líder silencioso.
Su excelente estado de forma esta temporada no es una casualidad, sino el resultado de años de dedicación. Se ha erigido como uno de los pilares indiscutibles del equipo, aportando no solo goles decisivos, sino también equilibrio defensivo y experiencia en los momentos clave de cada encuentro.
Es el reflejo en la pista de lo que la afición del PIensos Durán Albense reclama: compromiso, garra y calidad. Un jugador que hace levantar al aficionado cada vez que prepara su "cañonazo" para disparar a puerta y que todavía tiene un sueño: acabar su carrera deportiva jugando con su hermano.
