Afectados por los fuegos en Salamanca piden detalles de las ayudas, trámites ágiles y que cubran la maquinaria dañada
Foto de archivo del revuelo por el incendio de Cipérez
Valoran los 114 millones de euros de la Junta de Castilla y León para paliar los daños por incendios, pero exige concreción y agilidad en las medidas.
La organización agraria UPA Salamanca ha valorado positivamente el paquete de 114 millones de euros anunciado por la Junta de Castilla y León para paliar los daños ocasionados por los incendios en la comunidad. Sin embargo, exige una "concreción en las medidas y su inmediata puesta en marcha", ya que la publicación del acuerdo en el BOCYL no ha especificado las ayudas para las diferentes líneas como se esperaba.
Según UPA, los afectados necesitan saber con certeza qué ayudas recibirán para mitigar "en lo posible su tragedia". Esta demanda quedó patente en la reciente reunión mantenida por las tres OPAs con los damnificados por el fuego de Cipérez. La organización, según ha informado su secretario general, Carlos José Sánchez Rodríguez, trasladará estas peticiones en el próximo consejo regional agrario, el segundo convocado en una semana.
Un aspecto fundamental para la organización es la simplificación burocrática, especialmente la normativa que afecta a la condicionalidad de la PAC y al levantamiento de los pastos. UPA solicita que, para los grandes incendios (más de 500 hectáreas), la administración actúe de oficio, tal y como permite el artículo 92 de la Ley de Montes. Esta medida, según explican, sería "fundamental" para todos los fuegos sufridos en Salamanca, evitando que "por olvido u omisión se queden peticionarios sin hacer, o parcelas sin comunicar, que acarreara problemas posteriores".
Además, UPA Salamanca pedirá que las ayudas se extiendan a la maquinaria, como tractores y aperos, que ha sufrido daños durante las tareas de extinción. La organización subraya que la colaboración de los agricultores fue "altruista" y tuvo "consecuencias muy positivas, evitando la propagación del incendio".
Por ello, consideran "justo que se ayude a la reparación de estos medios de extinción, sin cuya ayuda, las consecuencias del incendio hubieran sido muy superiores". Los daños en estas máquinas se produjeron al pasar sobre piedras o tocones que eran imposibles de ver por la noche o con la escasa visibilidad provocada por el humo.
