Así es la búsqueda "quirúrgica" y "manual" del menor desaparecido en las pozas del Tormes
El operativo ha modificado su estrategia debido a las peligrosas corrientes en la zona donde cayó el joven, cerca de la piscifactoría.
La búsqueda del menor de 14 años desaparecido este domingo en el río Tormes, a su paso por Alba de Tormes, ha entrado esta mañana en una nueva fase con la incorporación de los Grupos de Especialistas en Actividades Subacuáticas (GEAS) de la Guardia Civil. El operativo se ha visto obligado a modificar su forma de trabajar tras más de catorce horas de rastreo debido a la complejidad de la zona donde se perdió el rastro del joven, un área de pozas con corrientes subacuáticas peligrosas.
El capitán de la Guardia Civil, Enrique Miguel, ha detallado las novedades del dispositivo desplegado. "Se ha cambiado la forma de trabajar tras más de 14 horas. El muchacho cayó en la zona de la represa por encima de la piscifactoría, en una zona de pozas y en la que bajo la lámina de agua hay distintas corrientes peligrosas", explicó el capitán. Estas circunstancias han llevado a optar por una intervención más especializada por parte de los buzos.
Según el capitán Miguel, "debido a estas características se ha optado por el trabajo de los buzos del GEAS de Guardia Civil que ha incorporado a efectivos llegados de Madrid y Valladolid". La nueva estrategia implica un rastreo minucioso y manual. "El trabajo se va a realizar sin barcas, a mano, de manera quirúrgica.
Los bomberos han estado retirando maleza para facilitar el acceso, pero los buzos van a trabajar en manual, a pie", añadió. Mientras tanto, "sigue manteniéndose la vigilancia en las riberas del Tormes aguas abajo mediante patrullas y drones". Los submarinistas del instituto armado están intentando reconstruir el momento de la caída con un amigo del desaparecido.
