Cerralbo reivindica el sabor, la artesanía, la cultura y la recuperación de su castillo en su feria
En esta edición ha habido novedades, como la exposición de vehículos clásicos, la inauguración del renovado edificio de las escuelas con una interesante muestra artística de Javier Corredera y un recuerdo a los vecinos que hace 100 años compraron el pueblo al Marqués de Cerralbo
Cerralbo ha celebrado hoy la III Feria Agroalimentaria 'Castillo de Cerralbo', un evento en el que combinan los productos de calidad de la zona con la artesanía y la reivindiacción del patrimonio local, concretamente del castillo hoy en ruinas. El castillo de Cerralbo fue construido en el siglo XIV por Esteban Pacheco, el señor de Cerralbo.
En esta edición, ha habido novedades como la exposición de vehículos clásicos, la inauguración del renovado edificio de las escuelas con una interesante muestra artística de Javier Corredera y un recuerdo a los vecinos que hace 100 años compraron el pueblo al Marqués
La jornada de feria, organizada por el Ayuntamiento con la colaboración de la Diputación, se abría a las 11 horas con la recepción de la alcaldesa Cristina González Pajuelo, y del resto de los ediles municipales, a las autoridades provinciales, la diputada de ferias, Nieves García y el diputado del PP por la comarca de Vitigudino Jesús María Ortiz. Alcaldes y concejales de los pueblos del Abadengo y de otros vecinos a Cerralbo arroparon también al equipo de gobierno de Cerralbo, además de los miembros de la Guardia Civil de Vitigudino y Lumbrales.
La alcaldesa, en nombre de sus compañeros de la Corporación, dio la bienvenida a los artesanos y a las autoridades: "Estamos muy contentos por poder celebrar la III feria 'Castillo de Cerralbo', un nombre reivindicativo porque nosotros desde aquí seguimos pidiendo a las autoridades que nos ayuden a la consolidación del castillo, que no dejen que se termine de caer". Cristina Gonzalez agradeció la presencia de los distintos artesanos "que han venido con sus productos, sin ellos no sería posible la celebración de esta feria". El agradecimiento se hizo extensivo "a todas las autoridades que hoy nos acompañan . En esta zona la verdad es que nos sentimos muy arropados, nos apoyamos mucho unos a otros" afirmó Cristina González.
La alcaldesa también agradeció la ayuda económica de la Diputación que ha permitido la recuperación del edificio de las antiguas escuelas y su acceso.
El diputado comarcal, Jesús María Ortiz, en su intervención habló de Cerralbo como "Un pueblo vivo", afirmando que "La feria reivindicativa de Cerralbo está viva", y dio la enhorabuena a la alcaldesa y todo el equipo del Ayuntamiento "por el trabajo que están llevando a cabo para el pueblo y para la zona". Ortiz dio las gracias a los alcaldes y concejales presentes y a los miembros de la guardia civil.
La diputada de ferias, Nieves García, dio la enhorabuena al ayuntamiento de Cerralbo, "por esta feria, ánimo y que no decaiga, sino que cada año vaya a más". Además, Nieves manifestó sentirse "muy contenta porque estamos aqui muchas mujeres, mujeres que llevamos el timón de nuestros pueblos" (Mujeres alcaldesas como ella, y las de Cerralbo y Villavieja de Yeltes, además de las concejalas de Cerralbo, de Lumbrales y de Villavieja estaban presentes en el acto)
Inauguración con la exposición artística de Javier Corredera
A continuación la comitiva de autoridades asistió a la inauguración del edificio de las antiguas escuelas y su acceso, instalaciones que serán destinadas a acoger cursos, exposiciones y otras actividades culturales y sociales para los vecinos de Cerralbo. Este nuevo espacio cultural se ha estrenado con la exposición de Javier Corredera 'Colores de la tierra', una interesante muestra de cuadros elaborados con distintas técnicas y utilizando placas de porcelana, de cerámica , esmaltes, diversos tipos de pinturas (al agua, disolventes...), y sus reacciones químicas sobre maderas (de encinas) y hojas de árboles, evaporación de resinas....
"Los colores de la tierra quieren romper las barreras que nos impiden darnos cuenta de los paisajes que tenemos en esta tierra" afirmó el artista, residente en Villavieja de Yeltes.
Una treintena de stans y vehículos
Por lo que se refiere a la feria Agroalimentaria y de artesanía, una treintena de stands ofrecían los productos de calidad de la zona (quesos, aceite, vinos y dulces) a los que se sumaban otros de distinta procedencia. Expositores de artesanía -muchos de ellos de la zona- mostraban sus productos a los visitantes que a lo largo de la mañana acudieron a la feria de Cerralbo. En el recinto también se ofrecían a la venta pollos asados y los tradicionales churros. Las tapas que se podían degustar en el bar municipal (que abrió sus puertas ayer, festividad de San Antonio) completaron la oferta a los visitantes.
Además, y como novedad en esta edición, el motor fue otro de los grandes protagonistas del domingo. Durante toda la mañana, se pudo disfrutar de una exhibición de vehículos clásicos fue otro de los protagonistas de la jornada de feria. Coches de distintos modelos, motos y un camión.
La jornada dominical estuvo amenizada por la charanga La Movida.
Cerralbo, '100 años de identidad'
Por otra parte, en el salón de la casa consistorial las autoridades conocieron la exposición 'Cerralbo, cien años de identidad', elaborada con apoyo del Institituto de las Identidades de la Diputación de Salamanca, un emotivo reconocimiento a los vecinos que hace 100 años compraron el pueblo al Marqués de Cerralbo. Alcaldes y concejales asistieron a una charla informativa centrada en el recuerdo de quienes en los años veinte del siglo pasado pusieron su empeño en hacer de Cerralbo el pueblo que es hoy. Los colonos del Marqués, animados por el cura de la localidad, formaron un sindicato agrario para gestionar la compra de las tierras que trabajaban como arrendatarios y las casas. El Sindicato Agrícola Católico de Cerralbo inicia su andadura el 1 de mayo de 1919 con el objetivo de comprar las tierras al Marqués. Pagaron cinco millones de reales, (un millón doscientas cincuenta mil pesetas). Para ello tuvieron que pedir el dinero prestado a familiares, conocidos y prestamistas hasta reunir doscientas cincuenta mil pesetas, además de entidades financieras como la Caja de Ahorros Popular de la Federación Agrícola Mirobrigense que aportó doscientas cincuenta mil pesetas, y el Banco hipotecario de España con setecientas cincuenta mil a pagar en cincuenta años. Quienes emigraron a América también enviaron dinero.
