Reabre la piscina climatizada tras una actuación de urgencia que ha costado 62.774,86€

Desde la jornada del lunes tiene reabiertas sus puertas la piscina climatizada de Ciudad Rodrigo, tras haber permanecido cerrada desde el 20 de marzo, cuando una racha de viento de más de 150 kilómetros por hora arrancó buena parte de la cubierta de la instalación, que cayó al parking anexo, sin causar ningún tipo de daño personal al producirse en plena madrugada, como recordó el alcalde Marcos Iglesias en la tarde del lunes en una visita al lugar junto a Ramón Sastre y Víctor Gómez.

Durante esta visita, los miembros del Equipo de Gobierno hicieron un repaso por las actuaciones de reparación que se han ejecutado, que comenzaron con la colocación de un techo provisional en los días siguientes para evitar que entrase agua en la instalación. A partir de ahí, se ha creado una nueva cubierta de forma expresa para la piscina (de ahí que no se haya podido ir más rápido a la hora de reabrirla –se agradeció “la paciencia” de los usuarios-).

A la hora de situar esta nueva cubierta (de más de 500 metros cuadrados), se ha enganchado con tornillería de acero inoxidable y galvanizado, para que no se dañe con la condensación como ocurría con la anterior, al no ser de ese tipo. En total, la reparación de la cubierta ha costado 62.734,86€, una cantidad que el Ayuntamiento espera recuperar (al menos en parte) gracias a los seguros. A esa cantidad se pueden sumar otras tres de otras tantas inversiones del Ayuntamiento.

Por un lado, al hilo del cierre, se han invertido 31.079,40€ en mejora del equipamiento (como nuevas corcheras, rejillas y salvavidas) y en la limpieza y rejuntado de los dos vasos, así como de los vestuarios. Y por otro lado, se han destinado 16.180,59€ a ‘otras actuaciones’. Toda la intervención de reparación y puesta a punto ha corrido a cargo de dos empresas locales (Metálicas Periker y AAC), a lo que se añade alguna contribución de personal municipal en materia de pintura y limpieza.

A esas cantidades el Ayuntamiento suma también los 42.914,30€ que había invertido de forma previa al incidente, para mejorar la eficiencia energética y reparar un grupo de presión. Precisamente, el cambio en materia energética ha permitido al Ayuntamiento reducir lo que le cuesta la piscina (se pasó de 191.398,31€ en 2022 a 142.962€ en 2023), remarcando Marcos Iglesias que se destinan “muchos recursos” por parte del Consistorio, no recuperándose nada ya que los ingresos por los precios públicos son para la empresa adjudicataria.

En torno a la gestión de la piscina, en la tarde del lunes se recordó que el actual contrato ya concluyó, estándose ahora mismo en una ‘prórroga’ hasta que se resuelva el nuevo proceso que se va a poner en marcha. Respecto al mismo, se están terminando de redactar los pliegos del concurso (a los que ya ha dado el visto bueno el Equipo de Gobierno), para poner en marcha en las próximas semanas la pertinente licitación.

Por el momento, Marcos Iglesias pidió a los usuarios de la piscina “que vuelvan” o directamente “que se animen” a usarla evitando a irse a otras localidades, añadiendo el edil de Deportes Víctor Gómez que “esperamos que los usuarios vuelvan, porque para el Ayuntamiento la piscina es costosa”, apuntando que es “muy productivo” para la actividad física.

En la visita de la tarde del lunes se señaló que el Ayuntamiento tiene previstas nuevas intervenciones en la piscina, como el arreglo del suelo del gimnasio (que está en “mal estado”) o el cambio de la iluminación que falta (por ejemplo de los vestuarios) a leds, remarcando Marcos Iglesias que el compromiso con la instalación es “fuerte”.