Las calles del centro histórico se impregnan de espíritu charro con calesa incluida
Los protagonistas del bloque matinal de La Charrada realizaron un pasacalles camino de la Plaza Mayor
Nada más concluir la exhibición de doma vaquera charra en el foso izquierdo de la Rúa del Sol se puso en marcha el pasacalles de los protagonistas del bloque matinal de la Fiesta de La Charrada de este año (jinetes, tamborilero y bailadores), que llenaron de colorido y animación el centro histórico mirobrigense con sus trajes y sones.
La mayor parte de los participantes en el pasacalles atravesaron la bóveda de la Puerta del Sol para adentrarse en el recinto amurallado, salvo la calesa con la que se contó este año, que obviamente tuvo que buscar otra puerta de la muralla al no caber por esa bóveda. El pasacalles transcurrió por las calles Muralla, Campofrío, Madrid, Plazuela del Conde, Cáceres, Avenida de Yurramendi y Cardenal Pacheco hasta alcanzar la Plaza Mayor.
El pasacalles pilló por ‘sorpresa’ a la mayoría de las personas que estaban por esas vías, tanto mirobrigenses como turistas, desenfundando especialmente los segundos sus teléfonos móviles para dejar constancia de la estampa, por ejemplo con la Catedral de Santa María de fondo.
Una vez en el ágora mirobrigense, los músicos y los bailadores se acercaron a la zona de la Casa Consistorial, para participar la mayoría de ellos en el festival matinal de La Charrada, mientras que los caballos se quedaron durante todo el festival con sus jinetes justo al lado de las hileras de sillas, posibilitando asimismo muchas fotografías, especialmente de turistas.
