Austeridad, sencillez y recogimiento marcarán el desfile penitencial de Amor y Paz 

Hablar de Jueves Santo en Salamanca es hablar, ineludiblemente, de la Hermandad del Cristo del Amor y de la Paz. Esta cofradía, de inmaculado blanco hábito monacal, es una de las más numerosas de la ciudad charra, tal y como explica su presidente, Manuel González: “Todos los años vamos aumentando, poquito a poco, el número de hermanos. Este año hemos hecho 26 hermanos nuevos y estamos muy contentos porque continúa el crecimiento de la Hermandad del Cristo del Amor y de la Paz”.

Pese a que este año se han dado algunas bajas debido a la disolución de la banda de cornetas y tambores de la hermandad, el número actual de hermanos es de 650, según detalla González: “Algunos de los miembros de la banda se marcharon, aunque otros sí que se han quedado en la hermandad como cofrades. Esas bajas las hemos compensado con las altas, así que la hermandad sigue creciendo”.

El hecho de ser una de las hermandades más numerosas de la Semana Santa de Salamanca no es motivo para sentirse más importante que otras: “Todas las hermandades somos igual de importantes en la ciudad aunque unas tengamos más hermanos que otras”. Además, Manuel González celebra el hecho de haber dejado atrás todos los problemas que trajo consigo la pandemia: “Nos hizo un poco de daño porque hubo gente que se apartó un poquito de los actos y de la vida en hermandad, pero poco a poco se ha ido recobrando la normalidad”.

Preguntado por los factores diferenciales de la Hermandad del Cristo del Amor y de la Paz, su presidente lo tiene claro: “Nuestras señas de identidad son la sencillez y la austeridad. Como yo digo, somos la hermandad de palo, de la maderita y el farol de hojalata. En nuestro desfile penitencial no portamos ningún elemento de oro ni de plata, por lo que la austeridad es total”.

Una de las principales características de la hermandad que procesiona desde El Arrabal para hacer Estación de Penitencia en la Catedral es que sus hermanos lo hacen con el rostro visible: “Aunque vayamos con la cara descubierta siempre está el sentimiento de recogimiento y oración”. Respecto a la procesión de este próximo Jueves Santo, apenas un par de novedades: “Estrenaremos la estructura de la campana y cambia el acompañamiento musical del Cristo del Amor y de la Paz”.

Respecto a esta novedad en el apartado musical, Manuel González explica: “La Agrupación Musical Cristo Yacente ya nos había acompañado muchos años hasta que tuvimos nuestra propia banda y en ese momento, entendieron perfectamente la situación. Ahora que nos hemos quedado otra vez sin música propia, nos pusimos en contacto y llegamos a un acuerdo de forma muy rápida porque daba la casualidad de que ellos tenían libre esa fecha. Estamos contentos de que vuelvan a poner su música nuestra procesión”.

Por último, el presidente de Amor y Paz, hace hincapié el que el otro desfile penitencial que organizan, el del Cristo de la Liberación en la madrugada del Sábado Santo, “es un funeral en el que ponemos en la calle al hijo muerto justo después de que salga su madre, la Soledad, desde la Catedral. Es un momento perfecto para rezar y recordar a nuestros seres queridos que ya no están entre nosotros pero que los tiene el Señor recogidos en su casa”.

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