La capea de vaquillas remata, también con gotas de lluvia, el apartado taurino del Carnaval 2025

Repitiendo como el año pasado en la franja matinal, la capea de vaquillas del Domingo de Piñata puso el punto y final en el segundo tramo de la mañana del domingo al apartado taurino del Carnaval del Toro 2025. Si el evento en sí estuvo marcado por la lluvia, esta capea de vaquillas tampoco se libró de su visita, aunque por suerte apenas fueron un par de ligeros chispeos, el primero de ellos justamente cuando se puso en marcha la capea, tras haber estado previamente luciendo un sol espléndido (que posteriormente volvió a aparecer).

Esa inestabilidad meteorológica que viene sufriendo Ciudad Rodrigo desde los días de Carnaval -que tuvo uno de sus mejores ejemplos el sábado previo a Piñata- fue posiblemente la causa de que la capea contase con menos ambiente que el año pasado, tanto a nivel de público (costó bastante más que se llenasen todos los huecos, y no llegó a haber apreturas) como de participantes a pie de Registro.

La capea contó con un total de 3 vacas, pertenecientes a la ganadería de El Capea, que fueron saliendo de un camión situado en la bóveda de la Puerta del Conde. Aunque se estuvo moviendo continuamente, a la primera vaca no se le sacó mucho rédito, pudiéndose destacar apenas un recorte y un salto. La segunda se movió algo menos que la primera, pero dio más juego, coincidiendo con llegada al Registro de la Charanga Manliao, que estuvo tocando hasta el final de la capea.

En lo que respecta a la 3ª vaca, la única con la cornamenta recta, dio también juego, protagonizando los 'sustillos' de la mañana, a un par de jóvenes delante suyo al rodarla y a otro que llegó apurado a subirse a las agujas (casi le engancha por detrás). Esta última acción se produjo en el ‘bonus’ que brindó esta vaca, ya que, al igual que las otras dos, se resistió a meterse en el camión, arremetiendo especialmente contra la puerta situada justo en la bóveda de entrada al Registro (esta 3ª vaca se llegó a alejar del camión).

Como era pronto, el público pidió más espectáculo, volviendo a salir al Registro la primera de las vacas, que no hizo demasiado, costando de hecho llevarla de vuelta hasta el camión. Exactamente a las 13.27 horas se lanzó el cohete que marcaba el final de la capea, momento en que cayó una rociada de agua del cielo, muy breve pero muy intensa.