Carlos Sánchez, secretario general de UPA Salamanca: "Pido inteligencia y coherencia a los políticos"

Inteligencia y coherencia a los políticos es lo que pide el secretario general de UPA Salamanca, Carlos Sánchez, de cara a este 2025, además de un año agrario normal y una producción acorde con los costes, que “se pueda vivir del trabajo”. El responsable de la OPA salmantina hace un repaso a la situación actual de la agricultura y la ganadería, y al fututo inminente.

La situación actual en el campo salmantino es muy diferente la parte ganadera de la agrícola, explica. "La situación ganadera ahora mismo es extraordinaria, tiene muy buenos precios y unos costes de producción acordes a esos precios, muy moderados". Hay que tener en cuenta, señala, que en 2024 se han arrastrado las consecuencias de la EHE del 2023, pero "por ejemplo, en ovino, los precios de los corderos son muy buenos, y el precio del coste de la paja, el forraje, el pienso está muy moderado, además de que en la zona ganadera hubo buen año en cantidad de forraje".

En este aspecto "no nos podemos quejar", afirma, pero hay sectores ganaderos que "están un poco peor", como la oveja lechera, "que van recortando los precios; los industriales del sector, a no muy largo plazo, se van a encontrar que no hay leche y se van a acordar, pero parece ser que están otra vez yendo a por ganaderos, con recorte en el precio de la leche. Aquí es donde ahora mismo la situación está más tensa, en la leche de oveja, porque la de vaca en Salamanca ya es anecdótica, ese sector lo hemos perdido".

El ganadero "en ese sentido, está bien y los problemas que podemos tener son los que veníamos arrantrando en vacuno con la EHE".

No se cubren costes

Otra cosa es el sector agrícola, sobre todo el tema de cereales, que "es el cultivo principal de Salamanca, lo que más tenemos y lo que más producimos. Ni siquiera los cereales en regadío han sido rentables este año". En Salamanca, señala, "el año pasado la cosecha no fue buena; sí lo fue en algunos municipios de La Armuña, pero en el resto de la zona cerealista de la provincia no lo fue e incluso en Alba y Peñaranda se puede considerar incluso mala".

Pero "si comparamos la cosecha media que tuvieron algunos con los nefastos precios que han tenido en sus productos cerealistas, realmente la campaña ha sido un verdadero desastre para nuestra provincia, no se han cubierto ni de lejos los costes de producción. Ni siquiera en regadío, donde por ejemplo, los maíces, ahora que han entrado a cosechar maíz, no está dando lo esperado, están hablando de entre 1.500 y 2.000 kilos por debajo de un año normal; con los costes de producción y a lo que están vendiendo el maíz, no libran ni los gastos. Se han llevado un palo; en secano están acostumbrados a que el año viene malo, en regadío no y este año se han dado cuenta de que no libran los gastos".

El problema es que los costes de producción -abonos, semillas, fitosanitarios, máquinas, repuestos en riesgo- son tan elevados que a que están vendiendo sus productos "no libran los gastos. A esos precios no se puede producir".

De cara a este año, explica, "la sementera en cuanto a secano se ha hecho en buenas condiciones, pero la gente está recortando todo lo que puede los gastos en herbicidas y, sobre todo, abonando menos, porque no me puedo gastar lo que no voy a sacar del cultivo. Y ese es el problema que nos encontramos. Ya es el tercer año que va un por este camino de situaciones complicadas, de precios malos en cereales y, por lo tanto, ha habido malas cosechas". Por eso, Sánchez, afirma que se debe reconducir la situación a que los precios de los productos agrarios sean acordes a los costes de producción.

Ucrania "no puede producir tanto"

Siguiendo con el sector cerealístico, el responsable de UPA Salamanca alude a los mercados internacionales, concretamente a la cantidad de cereal que viene de Ucrania sin aranceles. "A mí me parece que Ucrania no puede producir tanto cereal. No lo producía antes, cómo lo va a producir ahora que tiene una tercera parte del país ocupado o en guerra; ¿cómo va a producir tanto cereal? La pregunta es de dónde viene, de dónde lo están trayendo nuestros almacenistas o importadores, que son los que nos apuñalan; Putin no nos apuñala, nos apuñala un señor que tiene una empresa de importación y está trayendo cereal sin aranceles que no es ucraniano. Hay que buscarlo, encontrarlo y meterlo donde merece estar, encerrado, porque es un peligro; si no es un peligro ciudadano de que mate a nadie, es un peligro que está matando a los agricultores".

Europa, añade, "todavía no se da cuenta de que o producimos los productos nosotros o cuando nos hagan falta a lo mejor no los encontramos o a qué precios lo pagamos. Para tener agricultura, tenemos que tener agricultores y los estamos maltratando".

De cara a futuro, Carlos Sánchez pide tres cosas. "Primero, que venga un año agrario normal o bueno", en segundo lugar, que "los productos que venden los agricultores de ganaderos vayan a costes de producción, que puedan vivir de su trabajo". Y tercero, "coherencia e inteligencia para nuestros políticos, que parece que inteligencia tienen la justa, pero coherencia ninguna".

Productos prohibidos en la UE

En este sentido, alude a Mercosur. "Vamos a abrir las puertas no a unos agricultores de esos países, si no a unas multinacionales, para que importen productos a Europa, con aranceles bajos, por lo que nos pueden inundar de su productos, que se producen con sustancias prohibidas en la Unión Europea, que nosotros hemos decidido que ese fitosanitario o esa pesticida no puede utilizarse para producir, pero que está autorizado en América; se pueden producir productos transgénicos, aquí prohibidos, y se pueden utilizar, en el caso de la carne, anabolizantes como el clenbuterol, que aquí está también prohibido. Esos productos no pueden entrar en Europa".

Sánchez se pregunta quién lo va a controlar, y señala que "ahora mismo estamos importando más de 90.000 toneladas de carne de esos países a la Unión Europea, con aranceles, pero viene y se producen en esas condiciones. ¿Qué pasa? ¿Dónde está la coherencia de nuestros políticos? Si no, que me permitan producir aquí con lo mismo. Pido coherencia".

Y un control que "se tiene que exigir a la empresa importadora, de tal forma, que si yo soy importadora y encuentro esas deficiencias, porque sus controles no la han detectado, el culpable es él, el que lo paga es él, y el que va a la cárcel es él. Que ponga los controles, porque en puerto se controla lo que se controla, un 1% de lo que se importa; para las importaciones de esa cantidad de productos, el control es mínimo".

Hay que proteger al consumidor europeo, afirma, que "no entren sustancias ni productos prohibidos. El nivel de control es mínimo, cómo se garantiza, pues obligándote a tí que lo vas a importar; el culpable no es la multinacional que los produce, es del que se lo compra y lo trae aquí, que ponga sus controles, y si no, si se le pilla, que lo pague. Coherencia para nuestros políticos, inteligencia y coherencia".

"Pelear por lo suyo"

2025 será un nuevo año de movilizaciones. Ya se anunció en noviembre, recuerda Sánchez, que "iba a haber movilizaciones por el precio de los productos de los cereales, que no levantan cabeza ni cubren los costes de producción, así no pueden seguir" y también de cara a ese acuerdo de Mercosur, "a ver cómo viene". Un asunto que también preocupa en el sector ganadero, porque "esos países son grandes productores de carne, sobre todo vacuno, que nos pueden crear determinados problemas y que deben ser controlados, sobre todo cómo se producen, no puedo permitir que venga carne con clenbuterol".

Agricultores y ganaderos, añade, tienen que concienciarse y que "lo peleen; no se puede quejar uno en los bares, pero después a la hora de protestar, que vayan todos los demás por mí, que yo no voy. Mi obligación es promover las movidas, ir, acudir y defender sus intereses, pero no puedo defenderlos si ellos no van. Los políticos y la ciudadanía se guían por lo que ven; y si hay un acto de protesta con 5.000 personas, dirán, el problema es serio, pero si hay 50, dirán, se lo están inventando. Tienen que pelear lo suyo", concluye el responsable de UPA Salamanca.