Salamanca no se olvida de Valencia: “La sensación es de rabia y frustración. Los vecinos siguen en una situación lamentable”

Javier es uno de los voluntarios salmantinos que sigue acudiendo a la llamada de la solidaridad con los afectados por la terrible DANA que asoló parte del territorio valenciano hace más de un mes. Su primer viaje a Valencia le impactó muchísimo, tal y como describe en esta entrevista.

El pasado puente de diciembre se organizó con varios voluntarios para viajar con dos furgonetas a Valencia: “Llegamos una furgoneta llena con 9 pasajeros y otra con juguetes, cuentos para los niños, material escolar y material para bebés como biberones o esterilizadores”. Javier enfatiza en que el material escolar lo ha donado el colegio Antonio Machado y el resto de aprovisionamiento lo han comprado con donaciones realizadas a través de Ayudana y donaciones particulares de gente de Salamanca.

Su labor comenzó el viernes en Paiporta, donde acudieron tras haber recibido una solicitud de ayuda a través del perfil de Instagram de Ayudana para colaborar en un garaje. El sábado acudieron a otro garaje, esta vez en Catarroja, donde la planta -2 de un sótano se encontraba completamente inundada de barro y con coches aún en su interior: “Quedaban 9 coches en el interior y nos coordinamos con un grupo de chicos que tienen todoterrenos 4x4 y les estuvimos ayudando para poder sacar esos vehículos fuera. Los vecinos estaban desesperados porque nadie les daba una solución. Nosotros en una mañana les hemos vaciado el garaje y se lo hemos dejado completamente limpio”.

El sentir de la población en las zonas afectadas es de “rabia, frustración e impotencia porque aunque las calles están ‘limpias’ y transitables, los vecinos siguen con una situación lamentable en sus casas, garajes o negocios más de un mes después de la tragedia”, explica este salmantino.

El mensaje de agradecimiento de los vecinos valencianos es desgarrador, según relata Javier: “Nos decían que ya van respirando un poco más tranquilos. La gente ha asimilado la situación que tienen, pero agradecen muchísimo la ayuda que les prestamos. Lo fundamental sigue siendo que ellos recuperen la normalidad en sus vidas”.

De cara al futuro, Javier y su grupo lo tienen claro: “Seguiremos yendo a ayudar hasta que esto termine”. Para las fechas navideñas, estos salmantinos han donado juguetes para los más pequeños: “Aunque estos días hemos repartido algunos de forma personal, casi todo lo hemos entregado en una falla para que ellos lo gestionen con las familias que lo han perdido todo y que los niños puedan tener un pequeño detalle en Navidad. Nos hubiese gustado llevar más, pero nos ha sido imposible por temas logísticos”.

“Las imágenes siguen siendo terribles en las afueras de las ciudades, donde hay muchísimos coches amontonados y muchas calles con polvo y suciedad en las paredes”, finaliza Javier, quien avanza cuales son sus intenciones de cara a sus próximas actuaciones solidarias en Valencia: “Queremos centrarnos en las viviendas. En ayudar a pintar las casas de la gente, ayudarles a raspar las paredes para quitar la humedad… para que poco a poco puedan ir recuperando su vida normal”.