La Oración del Huerto cumple con mayor agilidad de lo habitual con su estación de penitencia
La procesión, que duró una hora, incluyó el habitual prendimiento en su primer paso por el ágora mirobrigense
Ciudad Rodrigo completó el fin de semana de apertura de la Semana Santa 2024 con la procesión de La Oración del Huerto, la última que se ha podido desarrollar con buena temperatura y sin tener que estar pendientes del cielo, según lo que anuncian las previsiones meteorológicas a partir de este lunes (podría incluso nevar en Miróbriga a lo largo de la semana).
Tras un responso en recuerdo de dos personas en el interior de la Iglesia de Cerralbo, se puso en marcha con total puntualidad la procesión, que este año se desarrolló íntegramente de noche, al no haber entrado todavía el horario de verano (ocurrirá el próximo fin de semana). Como suele ser habitual, la procesión salió hacia la Plazuela de San Salvador, para ir en su primera parte por Díez Taravilla y La Colada hasta la Plaza Mayor.
Una vez en el ágora, se produjo el habitual gesto del prendimiento a la imagen de Jesús Cautivo, corriendo a cargo este año la tarea del propio presidente de la Cofradía, Michel Hernández, quién participó en la comitiva vestido con traje negro, al igual que los representantes de las otras cofradías mirobrigenses que tomaron parte (asistieron todos). El único miembro de otra Cofradía que lució su indumentaria procesional fue el representante de la Cofradía de la Oración del Huerto de Salamanca.
Tras el gesto del prendimiento ante el amplísimo número de personas congregadas en esos instantes en la Plaza Mayor aprovechando la buena temperatura, la procesión prosiguió por la Rúa del Sol, para meterse por vías más recónditas como Gigantes, Arco, Campo del Pozo (donde se asomaron varias de las Hermanitas de los Ancianos Desamparados que atienden la Residencia allí situada), Cristóbal de Castillejo, San Juan, Colegios, Velayos y Sánchez Arjona, para regresar a la Plaza Mayor.
Con menos público que previamente, pero todavía con una buena expectación (mayor que en años previos), volvió a cruzar el ágora (con 15,5ºC de temperatura en esos momentos) la comitiva, integrada por un estandarte de la Cofradía de la Oración del Huerto, la Banda de Tambores de la Ilustre Cofradía de la Santa Cruz, el paso de Jesús orando en el Huerto de los Olivos, el de Jesús Cautivo, el capellán de la Cofradía, Ángel Martín Carballo, y los representantes de otras cofradías.
Por Julián Sánchez y unos metros de Cardenal Pacheco alcanzaron de nuevo la Iglesia de Cerralbo, donde se entró también rápidamente, tras apenas una hora de procesión (media hora menos que por ejemplo el año pasado).