Buscando a Nebrija, teatro y arte en Coca de Alba

La iglesia parroquial de San Juan acogió en Coca de Alba el montaje de Denis Rafter "Buscando a Nebrija" interpretado por el grupo de teatro "Lazarillo de Tormes" con el patrocinio del Área de Cultura de la Diputación de Salamanca a petición del Ayuntamiento de la localidad.

Su iglesia románica-mudéjar del XII, construcción singular de reducido tamaño que, de forma acogedora, fue testigo del disfrute por parte de los vecinos del pueblo que a ella acudieron entusiastas a ver la obra que llevaban ya tiempo esperando. La singular estructura de este recinto de ladrillo visto y decoración austera, pues tan sólo un crucifijo presidía el altar, fue un marco adecuado que propiciaba una acústica perfecta para que todo el público mantuviera la atención en el texto, canciones y bellos cuadros estéticos que esta obra de teatro en torno a la figura de Nebrija les proporcionaba.

Gracias a que este gran humanista puso las bases de nuestro idioma con la primera Gramática, pocos años después el ilustre vecino de Coca de Alba, el jesuita Gaspar Astete, editó su famoso catecismo del que se imprimieron multitud de ediciones en los siglos sucesivos y con los que se formó a millones de hispano-hablantes en la doctrina católica. Al igual que Nebrija, el padre Astete, fue también alumno en la Universidad de Salamanca.

A lo largo de la representación el público va descubriendo a Elio Antonio de Nebrija, su infancia, sus años de estudiante en Salamanca y posteriormente su trabajo como catedrático en su universidad. Hombre audaz, inteligente, altivo e incluso arrogante, le tocó vivir tiempos difíciles y peligrosos que, junto con la envidia, los celos y la mediocridad de la época le llevaron a ser incluso odiado por todos sus logros. Su elocuencia le ayudó a enfrentarse sin miedo a todos y a todo, defendiendo la verdad por encima de convencionalismos y manipulaciones.

Con sus aplausos y palabras agradecidas los vecinos de Coca de Alba afirmaron que esta obra es doblemente disfrutada al ser puesta en escena en su bonita iglesia, lo que la hace más especial y espectacular.