Aclamado despliegue de la Guardia Real en la Plaza Mayor mirobrigense

La Plaza Mayor de Ciudad Rodrigo fue tomada en la tarde del jueves por la Guardia Real Española, para disfrute de un amplísimo número de mirobrigenses de todas las edades, que fueron partícipes de varias actividades como momento culminante de la visita del Cuerpo durante estos días a la comarca (todavía falta que el sábado se acerquen a Fuentes de Oñoro y Sancti-Spíritus), dentro de la semana de ejercicios que están llevando a cabo en la provincia.

Dentro de las distintas secciones con las que cuenta la Guardia Real (que se están repartiendo cada día de esta semana por la provincia), fue la Escuadrilla Plus Ultra la responsable de los actos en la Plaza Mayor mirobrigense, que estuvieron en serio riesgo de suspensión por un notable chaparrón a partir de las 16.00 horas, sólo una hora antes del momento fijado para el arranque. Por suerte, el cielo se calmó rápido, saliendo incluso el sol (posteriormente, la mayor parte de la tarde estuvo nublada, pero sin riesgo aparente de lluvia).

Como elementos permanentes durante toda la tarde, la Plaza Mayor acogió por un lado una exposición de materiales de la Guardia Real: tres Harley Davidson, equipos de submarinismo, armas variadas, chalecos antibalas de la Policía Militar del Cuerpo, materiales de alpinismo, equipos de paracaidismo, perros especializados, o un camión al que se pudieron subir los niños.

Mientras tanto, justo al lado, hubo un circuito con sencillas pruebas para que los niños probasen si están capacitados para ‘entrar en la Guardia Real’. A todos los que completaron ese circuito se les entregó un diploma acreditativo y un póster de la Guardia Real (muchos niños lo recorrieron varias veces). De forma previa a hacer el circuito, a todos ellos se les pintaba la cara con la bandera de España (y se les colocaba un casco, ya que se subían a tres elementos de cierta altura).

Como primera acción de la Guardia Real en la Plaza Mayor, se escenificó el relevo de la guardia, primero desplegándose (se colocaron dos soldados en el inicio de la calle Madrid y otros dos a las puertas de la Casa Consistorial) y posteriormente retirándose. Entre medias, hicieron acto de presencia cuatro caballos del Cuerpo con sus jinetes, quienes dieron una serie de vueltas por el ágora, teniendo posteriormente los presentes –especialmente los niños- la oportunidad de tocar y de subirse a alguno de los animales.

Fue a partir de media tarde cuando se desarrolló el acto central, comenzando con un breve pasacalles desde la calle Cardenal Pacheco (frente a la Iglesia de Cerralbo) hasta la Plaza Mayor de la Unidad de Música de la Guardia Real y su Sección de Movimientos Floreados. En el ágora, los protagonistas fueron los integrantes de esta Sección, ejecutando una serie de coreografías con sus armas, que fueron muy aplaudidas. A continuación, la Sección (que fue seguida muy de cerca por varios miembros de la misma que estaban ‘de paisano’ entre el público) abandonó la Plaza, siguiendo los sones de la Unidad de Música, que salió tras ella.

Esta Unidad de Música regresó instantes después, delante en este caso de la ‘fuerza’ principal de los actos, perteneciente a la Escuadrilla Plus Ultra. Esta fuerza se situó en la parte superior de la Plaza, desarrollando (tras pedir permiso a las autoridades asistentes) el acto principal: el arriado de la bandera de España situada en un mástil a los pies de la Casa Consistorial. Tras ser retirada la bandera, hubo un toque de oración y los miembros de la fuerza descargaron su fusilería, para sorpresa y también susto de todos los presentes. El acto se cerró con la Banda y la fuerza abandonando la Plaza Mayor por la calle San Juan.

A continuación, las autoridades civiles, militares y eclesiásticas asistentes a los actos aprovecharon el ‘tiempo libre’ que tenían hasta la hora del concierto final en el Teatro Nuevo Fernando Arrabal para entrar en la Casa Consistorial y que así los ‘foráneos’ conociesen por ejemplo el Salón de Plenos (donde llamó la atención el artilugio que servía para tallar a aquellos que iban a la mili) y el Despacho de la Alcaldía, y viesen las espectaculares fotografías aéreas de Ciudad Rodrigo que hay colgadas en las paredes.

Tras ello, se dirigieron hacia la parte sur de la Plaza Mayor para contemplar y saludar a los responsables de la exposición de materiales de la Guardia Real, que registró un continuo trasiego, al igual que el circuito infantil, hasta la hora que se dieron por finalizadas ambas actividades, sobre las 20.00 horas (durante este tramo también siguieron los caballistas en la parte norte del ágora). Para simbolizar el ‘cierre’, las Harley Davidson se marcharon de la Plaza con sus sirenas activas, manteniéndolas así en su trayecto por las calles mirobrigenses.