Las ‘Miradas en Blanco’ de la Joven Compañía de Danza de CyL sorprenden a escolares mirobrigenses

Alumnos de Secundaria del Colegio Misioneras de la Providencia-Santa Teresa y del IES Fray Diego Tadeo de Ciudad Rodrigo asistieron en la mañana del martes en el Teatro Nuevo Fernando Arrabal a la última función por este curso 2022/2023 de la Escuela Municipal de Espectadores, que en esta ocasión fue una propuesta de danza contemporánea, de la mano de la Joven Compañía de Danza de Castilla y León.

Esta entidad ofreció el montaje Miradas en Blanco, que ya se pudo ver -como estreno absoluto- en la Feria de Teatro de Castilla y León 2021 (en la que también hizo su debut la propia compañía), en aquel caso en el Espacio Afecir. Este nuevo pase mantuvo las líneas generales de aquel estreno, aunque hubo variaciones en el elenco (que asimismo fue ligeramente más reducido, de 7 jóvenes frente a 8), cambiando de este modo los encargados de interpretar los distintos cuadros coreográficos (solos, dúos, tríos o el conjunto completo).

Las piezas de baile en sí, con la violencia de género y otros aspectos del discurso feminista como leit motiv principal, fueron complementadas, además de con música alusiva, con la emisión sonora de varios recursos, como poemas y pensamientos de escritoras, pensadoras, líderes y activistas (e incluso extractos de una charla del popular Juez Calatayud). Finalizada la función, y como ocurre siempre en el marco de la Escuela de Espectadores, los escolares asistentes tuvieron la oportunidad de realizar preguntas (al principio se mostraron ‘tímidos’, hasta que les dijeron que se volvían para clase) a los 7 jóvenes bailarines.

En este coloquio, dirigido por Meli Guerrero y Miriam Hernández, hubo tiempo para conocer detalles sobre el propio espectáculo y la trayectoria vital de sus protagonistas (a qué edad empezaron a bailar, por qué, qué supone para ellos la danza, etc.), que insistieron a los chavales en que cualquier cosa que quieran hacer en la vida requiere “trabajo y esfuerzo”. Según fueron comentando los escolares (cuya edad dista en algunos casos apenas dos años de los bailarines), les había sorprendido el espectáculo, ya que tenían otra idea sobre lo que iban a ver y sobre lo que era la danza.