Presentado 'Alma mater', una antología poética que celebra a las madres en apoyo de Cáritas, de la mano de Juan Carlos López Pinto y Carmen Borrego

Este libro solidario es un abrazo. Un abrazo de Juan Carlos López Pinto, periodista, poeta, activista social y Carmen Borrego, ilustradora, fotógrafa y diseñadora gráfica. Y lo es en presencia de algunos de los autores de la cultura y sociedad salmantina como Antonio Matilla, Pedro López García, Montserrat González, José Alfredo Pérez Alencart, José Luis Puerto, Alfredo Pérez Alencart, Álvaro Maguiño, Isabel Bernardo, Charo Alonso, Julián Santos, JHosé Amador Martín, Asunción Escribano, Luis Felipe Delgado de Castro, Esther Ferreira Leonís, Elena Díaz Santana, J.M. Ferreira Cunqueiro y Tomás González Blázquez.

La iglesia de la Veracruz, cuya cofradía quiso honrar el 400 aniversario de la llegada de la imagen de la Inmaculada de Gregorio Fernández, como no podía ser de otra manera, es el espacio elegido para la presentación de un libro que pretende ser un homenaje a las madres el sábado anterior al día de las mismas, y un ejercicio de reconocimiento a las instituciones que nos ayudan y apoyan cada día para ser mejores: Cáritas Diocesanas, con Carmen Calzada a la cabeza, el Teléfono de la Esperanza, el Comedor de los Pobres, Manos Unidas, el padre Blas Rodríguez, el Director de Proyecto Hombre de Salamanca, don Emiliano Tapa, don Jesús Garrote, don Antonio Romo y las monjas de clausura salmantinas, personas e instituciones que ofrecen lo mejor de sí mismas en la entrega a los demás y a quienes se homenajea en este libro. Libro salido de las manos de la editorial Kadmos y que ha sido coordinado por Tomás González Blázquez.

Un libro que es abrazo y que tiene como protagonistas a Juan Carlos López Pinto, periodista siempre y ahora, debido al accidente vascular que padeció, heroico activista por los que más lo necesitan. La suya es una entrega absoluta, valiente y que concita a su alrededor todo el apoyo de quienes le quieren y le siguen. Y a su lado, ilustrando los textos de este libro pleno de lecturas, lecturas religiosas, artísticas, poéticas, vivenciales, Carmen Borrego, cuyo trabajo como ilustradora le da al volumen un valor añadido lleno de vida, de talento y de color. Las suyas son obras delicadas, inolvidables, cercanas, sencillamente conmovedoras. Y es ese efecto fantástico el que hace de Alma Mater una experiencia no solo editorial, sino viva, propiciada para que todo lo recaudado sea para fines benéficos, por empresas entregadas como Acinsa, Salamanca Al Día o Creadsa.

Gracias a ellos, este volumen de poesía y arte cobra vida a mayor gloria de las madres, y sobre todo, de la Madre que todo lo cuida, representada por la hermosa imagen de Gregorio Fernández, madre Iglesia, madre de todos, madre que cada uno de nosotros guardamos en el corazón, la madre es el pretexto de un libro donde se suceden los poemas y las reflexiones artísticas y religiosas de un volumen que también ha contado con el apoyo del Ayuntamiento de Salamanca, en la persona de su teniente alcalde, Doña Ana Suárez Otero. Manos que se unen no solo para hacer un libro hermoso, sino para presentarlo con toda la emoción que requiere.

En el maravilloso escenario de la iglesia de la Veracruz, gracias a la hospitalidad de la cofradía, las palabras son de agradecimiento, los versos, emoción contenida. Hablan los artífices del proyecto, Juan Carlos lee el maravilloso poema dedicado a Carmen Calzada y Carmen Borrego recuerda que cuando le propuso ilustrar un libro solidario y de tanta gente “a la que amo y admiro” no lo dudó, y fue dibujando a medida que recibía los textos. Textos que hablan de la iglesia como Madre, del valor artístico de la pieza de la Inmaculada que preside el acto, textos, como recorre la poeta Elena Díez Santana, son poesía entregada a la Madre, con mayúsculas, la Madre que como Cáritas, acoge a quienes lo necesitan. Y entre las palabras, la música, la música maravillosa de la mano de Víctor Gil y de Sonia Fernández. Parece mentira que un teclado y un violín puedan habitar tanto, abrazar tanto. Y es el abrazo el último verso de este acto… un abrazo que engloba con gratitud a personas y entidades que acogen, que cuidan a quienes más lo necesitan. Porque es esta antología bella “que entra por los ojos”, como afirma Juan Carlos López Pinto, un abrazo coral, un homenaje a la Madre de la Veracruz, impulsado por su cofradía, pero por extensión, a todas las madres, madres generosas, madres que son alma. Alma mater.