Calurosa mañana de Charrada con protagonismo local, incluido de niños y jóvenes
Uno de los fosos de la Puerta del Sol albergó una exhibición de doma vaquera charra salmantina
Las miles y miles de personas, entre mirobrigenses y forasteros, que están disfrutando de este Sábado Santo en las calles de Ciudad Rodrigo tienen como hilo conductor una nueva edición de la Fiesta de La Charrada, cuya franja matinal estuvo marcada por el intenso calor reinante, aunque a última hora de la mañana empezó a soplar en la Plaza Mayor una ligerísima brisa que al menos alivió un poco la sensación térmica que hacía en esos momentos.
Como marca la tradición, La Charrada comenzó ‘por toda la ciudad’, con el pasacalles de varios tamborileros y dulzaneiros tradicionales por distintos rincones de Ciudad Rodrigo para anunciar la celebración. El primer punto concreto de referencia fue uno de los fosos de la Puerta del Sol, donde tuvo lugar al mediodía una exhibición de doma vaquera charra salmantina, narrada por José Ramón Cid Cebrián, coordinador de La Charrada, que hay que recordar que está promovida por la Delegación de Cultura del Ayuntamiento mirobrigense.
La exhibición en sí corrió a cargo de Víctor Herrero (de El Bodón) y Carla Carballo de Elías, quiénes estuvieron acompañados en el foso por otros seis caballistas, Ángel Manzano, Juan Carlos García, Julián, Julio, Jesús David Fernández y Mónica Fernández. En torno a ese foso se congregó un buen número de espectadores, que tuvieron eso sí que ‘esquivar’ los puestos del mercadillo sabatino, salvo en el tramo del Revellín de San Andrés (también se pudo contemplar ‘limpiamente’ desde la muralla).
Finalizada la exhibición, llegó la hora de realizar un pasacalles con esos caballistas, y un amplio grupo de tamborileros, dulzaineros tradicionales, charros y charras hasta la Plaza Mayor. Para evitar el mercadillo, y no generar más caos en la ya de por sí complicada mañana del Sábado Santo en Ciudad Rodrigo, la comitiva atravesó la bóveda de la Puerta del Sol para coger las calles Muralla y Campofrío y salir a la calle Madrid. Ahí tomaron la Plazuela del Conde, Cáceres, Avenida de Yurramendi y Cardenal Pacheco (algunos grupos ‘atajaron’ por la Plazuela del Buen Alcalde) hasta entrar todos juntos en la Plaza Mayor.
Una vez en el ágora, los caballistas se echaron a un lado, dirigiéndose los grupos de baile hacia el gran escenario que había sido montado en las últimas horas a los pies de la Casa Consistorial, que albergó el habitual festival matinal de La Charrada con grupos locales, que fue abierto por la delegada de Cultura del Consistorio, Beatriz Jorge Carpio, antes de tomar la palabra el presentador, José Ramón Cid Cebrián, que fue introduciendo a los distintos grupos.
La sesión la abrió Roble Charro, que bailó una charrada, un picao y un fandango de Vegas de Domingo Rey; continuó el grupo decano de Ciudad Rodrigo, El Botón Charro (fue fundado en 1997), con una charrada y una jota; prosiguió Al Son del Tamboril, con una charrada, una jota y un charro de la Ribera con jota; y lo cerró el grupo más joven, Aires Charros, con una charrada, un charro, un picao corrido, un baile de las Cintas, y un charro con jota de la Ribera. En lo que respecta a la charrada bailada por éste último grupo, se la dedicaron a su único bailador, David, que además era “su cumpleaños y su debut”, según explicó su tamborilero.
Tras la actuación de este último grupo, todavía hubo algo más de animación sobre el escenario, con la intervención fuera de programa de algún grupo más hasta que llegó la hora de que todos se fuesen a comer.