Limpia pero floja tarde final en materia taurina con sólo 1 toro bajando en el desencierro

Exactamente a las 20.09 horas de la tarde del Martes llegó a su conclusión el Carnaval del Toro 2023 en lo que a materia taurina se refiere -quedaba pendiente el Pasacalles de Cenizos-. Esa fue la hora a la que hizo su entrada en los Toriles de San Pelayo el único toro que acabó por bajar en el desencierro de la tarde, lo que unido a cómo se desarrolló previamente la capea, hizo que las últimas horas del Carnaval fuesen bastante flojas en este apartado.

Así, tras un Festival en el que se cortaron orejas por doquier, con Cayetano muy demandado para hacerse fotos (en los prolegómenos se saludó efusivamente con el doctor Enrique Crespo, quién salvó la vida a su hermano Fran Rivera), y la lectura por parte del concejal de Festejos, Víctor Gómez, de los ganadores de los concursos carnavaleros (uno de los grupos estaba en los tablaos, celebrándolo efusivamente), llegó la hora de la última capea del Carnaval 2023.

Esta cita contó con 3 astados como suele ser habitual, pero no todos ellos eran de la ganadería de Torrealba protagonista del día, ya que uno de sus toros se rompió un cuerno durante el encierro y ya no volvió a participar en ningún acto. Como tres de los toros habían bajado en el desencierro matinal (junto a uno de la capea nocturna del Lunes), sólo quedaban dos de Torrealba, que fueron complementados con el Toro del Aguardiente de la ganadería de El Sierro donado por la Comisión Toro del Voto de Villoria.

Este astado fue el primero en salir a la capea, dando apenas la posibilidad de hacerle un par de recortes. El segundo, ya de Torrealba, dio un poco más de juego tanto a recortadores como a maletillas, siendo su problema que le costó entrar en toriles varios minutos. Y el tercero, también de Torrealba, dio especial buen juego a los recortadores, protagonizando uno de ellos un momento de máximo riesgo al cruzar por delante del astado, muy apurado, justo cuando salía.

Aunque ya eran casi las 19.30 horas, y el tiempo apremiaba para cumplir con el horario del Pasacalles de Cenizos (las 20.00 horas), se sacó de nuevo el Toro del Aguardiente, que no hizo absolutamente nada. Estaba previsto sacar otro toro más de repetición, pero la idea se descartó, procediendo a celebrar el desencierro, que en principio iba a contar con los dos toros de pelaje negro de Torrealba que habían quedado en liza. Sin embargo, uno de ellos no quiso volver a pisar la calle Madrid, con lo que fue encerrado en los toriles de la Casa Consistorial.

Así, sólo acabó por bajar un toro, que alcanzó bastante rápido el Registro. Una vez allí, se negó a continuar en dirección a la Glorieta del Árbol Gordo, como si le afectase la oscuridad que hay en ese punto. De este modo, este astado retrocedió metros hasta casi la bóveda, apareciendo por allí los pastores para encauzarle. En este tiempo en el Registro, el toro se acercó peligrosamente a las agujas, e incluso dio un buen susto a tres chavales que estaban sentados en el muro, cuando levantó la cabeza de repente (por fortuna, los chavales reaccionaron a tiempo, evitando que les enganchase).

Tras unos minutos, el toro salió por fin del Registro, apuntando a dar mucha guerra en el cierre carnavalero, pero tras permanecer un poco en la zona de los Pinos y con la compañía de los bueyes, dio una arrancada hasta los toriles, donde entró como decíamos a las 20.09 horas. Con el Campanazo que marcaba ese final, se pudieron escuchar aplausos de cierre del Carnaval al menos en la zona de los pinos.

La jornada del Martes fue ‘tranquila’ para los efectivos de Cruz Roja, con sólo 10 atenciones en el global del día, aunque 3 requirieron de traslado: el corneado por el Toro del Aguardiente en el Registro (que es de Marruecos); la espectadora natural de La Alberca enganchada por un toro del encierro; y una cacereña de 24 años por una taquicardia. Las dos primeras personas fueron llevadas al Hospital de Salamanca y la tercera, al Centro de Salud.

Los otros 7 atendidos recibieron el alta in situ, tras presentar heridas en manos, dedos o cabeza, contusiones en rodillas, esguinces de tobillos, o golpes en piernas. En el tramo de tarde, Cruz Roja apenas tuvo que hacer dos atenciones: a un salmantino de 21 años por una herida en la cabeza, y a otro salmantino de 55 años por un golpe en la pierna derecha. En este parte también se incluye la atención realizada el Lunes, en el tramo coincidente con la capea nocturna, a un mirobrigense de 20 años por una herida en la cabeza (recibió el alta in situ).