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La lluvia y los truenos hacen de bisagra a un Martes con ambiente callejero y petición sin éxito de Cenizos
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CIUDAD RODRIGO | MARTES DE CARNAVAL

La lluvia y los truenos hacen de bisagra a un Martes con ambiente callejero y petición sin éxito de Cenizos

Actualizado 22/02/2023 03:09
David Rodriguez

Los Amigos del Alguacilillo recibieron la visita de Enrique Crespo antes de poner rumbo a la Plaza Mayor

Ciudad Rodrigo vivió una última jornada de Carnaval 2023 con un notable ambiente callejero para ser el día final del evento, pudiéndose encontrar a última hora de la mañana del Martes numerosos grupos en los establecimientos de hostelería de las calles anexas a la Plaza Mayor (Rúa del Sol, San Juan, Sánchez Arjona o Julián Sánchez), así como en su parte sur, donde seguían funcionando varias de las casetas-bar.

Esos espacios céntricos contaron con la animación de las charangas mirobrigenses (que fueron rotando por los diversos lugares), e incluso de algún espontáneo, como un hombre que en la parte sur se puso a hacer el pino, así como la grulla (era el mismo que lo hizo el lunes en el coso antes del encierro). De igual modo, había buen ambiente en las casetas de la Plazuela del Buen Alcalde, donde se podían dar los últimos paseos por los puestos comerciales (en la Plazuela del Conde ha estado el famoso exnarcotraficante Laureano Oubiña).

La jornada marchaba bien, pero a las 15.00 horas se puso a llover con cierta fuerza y a tronar, tal y como habían anunciado las previsiones meteorológicas (por fortuna no se cumplieron al completo, ya que anunciaban más lluvia para otras franjas del Martes), con lo cual se hizo imposible permanecer en la calle a partir de esa hora si no era a cubierto, rompiendo ese buen ambiente callejero.

Alrededor de una hora después, el cielo se calmó, dirigiéndose en primer lugar desde las antiguas cocheras de Alipio hasta la Plaza Mayor la comitiva de los Amigos del Alguacillo, coincidiendo con la subida por la Rúa del Sol de numerosos mirobrigenses también en dirección al Festival (la lluvia hizo que subiese más tarde el público, ataviado muchos con paraguas o chubasqueros).

En el ágora, los Amigos del Alguacilillo dieron la vuelta completa, con Tato Galerías megáfono en mano saludando a distintos ocupantes de los tablaos, incluido a familiares suyos. Tanto sobre la arena, como en la parada previa para rezar a San Agustín, lanzó múltiples vivas, a San Sebastián, San Blas, la Virgen de la Peña de Francia, Ciudad Rodrigo y España, además de desear “viva el Carnaval 2024, os espero a todos”.

Por cierto, que esos Amigos del Alguacilillo habían estado rezando (para que no lloviera) a la Virgen de la Peña de Francia en su reunión diaria en las antiguas cocheras de la Rúa del Sol –esta vez en la zona a cubierto- por donde se acercó el cirujano Enrique Crespo antes de marcharse a la enfermería. Aunque el cielo tardó un poco en despejarse, ya no llovió más, lo que permitió recuperar el ambiente callejero a base de grupos durante la tarde (así como en el recinto ferial), quedando la lluvia y los truenos como ‘bisagra’ del día, al producirse en una hora tan central como es de 15.00 a 16.00 horas.

Como otra curiosidad de las últimas horas del Carnaval 2023, varios jóvenes que estaban en la balconada del Ayuntamiento o su entorno siguiendo el festival con picadores se arrancaron a pedir Cenizos, pero su solicitud no llegó a buen puerto, con lo cual este año el evento se queda con su duración clásica.