El Teatro Calderón acoge con éxito la obra ‘Amicus Nebrija’ escrita e interpretada por Denis Rafter
La funciòn llega impulsada por la Diputaciòn de Salamanca
Para conmemorar el quinto centenario del gran humanista español, el Área de Cultura de la Diputación de Salamanca ha llevado a cuatro localidades de la provincia al afamado autor, director y actor irlandés Denis Rafter. La tarde del domingo, la obra que trata sobre la figura de Elio Antonio de Nebrija, personaje clave en la historia de España, fue representada en el teatro Calderón de Peñaranda.
Nebrija durante su vida escribió libros, dio conferencias sobre las humanidades y fue persona clave en la fundación del castellano como lengua universal.
Para contar su vida y relatar como telón de fondo los grandes acontecimientos en la historia de España de hace 500 años, apareció en el escenario como un espectro del pasado, un narrador celta, un bardo, y nos dio una visión de Nebrija tanto como persona como del gran hombre de letras y autor de la primera Gramática de la Lengua Castellana.
Es histórico el hecho de que España e Irlanda hayan tenido una amistad estrecha durante muchos siglos. Por eso el bardo celta nos contó que había sido íntimo amigo de Elio Antonio de Nebrija y desde muy joven había compartido los triunfos y tragedias con él. Así el público pudo volver atrás en el tiempo para revivir de una manera íntima y humana la historia de Nebrija.
El celta nos relató sus primeros encuentros cuando eran jóvenes estudiantes en Salamanca, el viaje de Nebrija a Italia, su encuentro con los Reyes Católicos, su manera de presentar una clase magistral, su defensa contra la Inquisición, el escándalo de su rechazo por parte de la Universidad de Salamanca y su muerte en Alcalá de Henares. Todo contado con elocuencia y emoción.
Es una historia de amistad entre dos personas muy distintas, un genio español de mucha fama llamado Elio Antonio de Nebrija y un irlandés poco ambicioso pero filosófico y con gran sentido de humor.
La obra es una visión basada en los hechos históricos pero inspirada en la universalidad del hombre a través de los tiempos. Nos presentó un brindis a la vida y el trabajo del gran humanista español en el Quinto Centenario de su muerte y el público peñarandino supo reconocer con una gran ovación el gran trabajo mostrado por Rafter sobre las tablas del Calderón