El 112 Transfronterizo y la propuesta del tren Aveiro-Salamanca, novedades de una Cumbre Ibérica enfocada en la energía

Los gobiernos de España y Portugal se han reunido este viernes en la localidad portuguesa de Viana do Castelo. La innovación marca esta 33ª Cumbre Ibérica, en la que ambos mandatarios han querido trasmitir el momento de buena sintonía que atraviesa la relación entre los dos países ibéricos, calificada como “excelente” y “excepcional” por Pedro Sánchez, afirmando que “compartimos hojas de ruta”.

El primer ministro de Portugal, António Costa, ha recibido esta mañana al presidente español, Pedro Sánchez, en el centro de la ciudad miñota, siguiéndose la protocolaria ceremonia militar.

Como esta Cumbre Hispano-Lusa se había enfocado en la innovación, la jornada ha comenzado con una visita al Laboratorio Ibérico Internacional de Nanotecnología, ubicado en la cercana ciudad de Braga.

Una de las mayores novedades que incumbe a las tierras de frontera, es la presentación del servicio 112 Transfronterizo, que arranca desde hoy como proyecto piloto en la Raya gallego-portuguesa. Los habitantes de las comarcas fronterizas de Galicia y del Norte de Portugal podrán ser asistidos por los servicios de emergencia de uno u otro lado, conforme más convenga por cercanía o por mejor preparación para el abordaje de la emergencia de que se trate, médica o de otro tipo.

En el caso de una emergencia de salud, ambulancias y hospitales de un lado podrán asistir las urgencias médicas del otro. Posteriormente, el paciente podría elegir dónde continuar con su tratamiento, si donde ha sido atendido o en su país.

Las respectivas administraciones se pondrán de acuerdo para repartir los gastos de este nuevo servicio, que los gobiernos de España y Portugal esperan poder extender al resto de la franja fronteriza durante el año que viene.

La entrada en vigor del 112 Transfronterizo ha sido hecha pública por la ministra portuguesa de Cohesión Territorial, Ana Abrunhosa, acompañada por la secretaria de Estado de Desarrollo Regional, Isabel Ferreira y del ministro de Sanidad, Manuel Pizarro.

En esta Cumbre se ha materializado lo ya comprometido en las bilaterales de Guarda (2020) y Trujillo (2021) relativamente al Estatuto del Trabajador Transfronterizo. En este sentido, se va a publicar la “Guía del Trabajador Transfronterizo”, que contiene los derechos que pueden ejercer los trabajadores que vivan en un lado y trabajen en el otro, relativamente a Educación, Servicios Sociales, Sanidad o Empleo.

Hasta un total de 18 ministros, nueve portugueses y nueve españoles, además de secretarios de Estado y personal de ambas embajadas, han participado en la reunión celebrada en esta localidad de la costa norte portuguesa.

Más allá de medidas concretas, el mensaje que han querido trasmitir Costa y Sánchez es que la península ibérica habla con una sola voz en Europa relativamente al ámbito energético.

“La intensidad de nuestras relaciones hace que en estas cumbres se aborden prácticamente todas las materias de gobierno: terrorismo, turismo transfronterizo o promoción conjunta de España y Portugal como destino turístico”, ha dicho António Costa.

En la bilateral se ha hecho también balance sobre los temas que más han ocupado la relación hispano-lusa durante el último año. En esta ocasión, uno de ellos ha sido la sequía y la polémica generada con los trasvases.

Once acuerdos entre los que destacan tres

• La “Constelación Atlántica” es el nombre que se le ha dado a una estructura de 18 satélites para vigilancia marítima y terrestre, un recurso que España y Portugal quieren compartir para la anticipación de fenómenos atmosféricos adversos, prevención de incendios y otras amenazas que pudieran afectar a la salud, la seguridad o la economía de los territorios.
• El Centro Ibérico de Investigación y Almacenamiento de Energía. Se ubicará en Cáceres y será, según el primer ministro Costa, “hermano del Laboratorio Ibérico de Nanotecnología de Braga”.

Además de un almacén de energías renovables, desde este centro cacereño se fabricarán semiconductores y baterías, para evitar la dependencia asiática y de otros países europeos fuertes en esta industria.

• La Guía del Trabajador Transfronterizo y el 112 Transfronterizo.

El lobby ibérico de la energía

Tanto Costa como Sánchez han querido rentabilizar el éxito de su contribución a uno de los principales problemas europeos en la actualidad, a través de la llamada excepción ibérica, como una “solución para una isla energética, como es la península ibérica, pero también para otros socios europeos”, ha manifestado Sánchez.

El presidente español ha recordado que la propuesta ha de ser concretada antes del 15 de diciembre y que para ello será fundamental lo que se pueda avanzar durante la próxima reunión de los países del Mediterráneo, el miércoles 9 de noviembre en Alicante.

Antes de mediados de diciembre tendrán que saberse los plazos, costes y financiación del llamado Corredor Verde entre Portugal, España y Francia, en el que se incluye el enlace Portugal-Zamora para hidrógeno verde y gas, firmado el 20 de octubre pasado.

En cuanto a la energía, Sánchez afirma que quiere que España y Portugal constituyan “el mejor posible de los lobbies”.

Las vías de comunicación

Este apartado solo ha sido abordado en la rueda de prensa con que culmina el encuentro y a él se ha referido apenas el primer ministro portugués, que ha avanzado que ambos países trabajan para la “transición de la carretera al ferrocarril para el transporte de mercancías”.

António Costa también ha dicho que habrá un incremento de los enlaces ferroviarios entre los dos países, haciendo referencia a las obras de la vía de alta velocidad Sines-frontera extremeña, a la que ha calificado como “la mayor inversión portuguesa en obra civil en 100 años”, que formará parte de la futura alta velocidad entre Madrid-Lisboa, y que estaría lista para principios de 2024, según ha afirmado Costa.

Además, el primer ministro portugués se ha referido al ferrocarril entre Aveiro y Salamanca, como un proyecto sobre el cual se están llevando a cabo “estudios avanzados” y el la vía férrea Faro-Huelva-Sevilla, como un proyecto también “en estudio”, pero en fase preliminar.

El presidente Sánchez no ha hecho ninguna alusión a las vías de comunicación entre España y Portugal, limitándose a responder cuando ambos mandatarios han sido cuestionados por los periodistas sobre la extinta unión ferroviaria Madrid-Lisboa a través de Salamanca. El Lusitânia era un tren-hotel nocturno que pasaba diariamente por Salamanca y le daba servicio hacia muchas localidades portuguesas hasta Lisboa, así como hacia Madrid, capitales castellanas, vascas y la frontera francesa por Irún.

Costa ha contestado que “no hubo condiciones para retomarlo” después del cierre de fronteras por la pandemia, para continuar argumentando que, una vez desbloqueada la inversión en la alta velocidad portuguesa, la unión ferroviaria ibérica se apoyará en el eje Madrid-Lisboa-Oporto-Vigo. “Ahora, con la proyectada alta velocidad entre Lisboa-Oporto-Vigo podremos construir los enlaces de futuro con España”.

Por su parte, el presidente Sánchez ha incidido en la misma idea expresada por Costa, respondiendo con una alusión al nuevo tramo Badajoz-Plasencia, inaugurado el verano pasado, que formará parte de la futura alta velocidad Madrid-Lisboa.

Nada ha sido dicho respecto a la repercusión en España de la recientemente anunciada rehabilitación de los últimos kilómetros del Tren del Duero hasta la frontera con las Arribes salmantinas.

Como tampoco queda formalizado ningún compromiso sobre la reclamada autovía entre Zamora y la frontera por Alcañices, la mejora de la carretera entre Bragança y Sanabria o la carretera IC31, entre Castelo Branco y la frontera de Cáceres, que aproxima el centro de Portugal a Castilla y León por el sur de la comunidad.

Entre los acuerdos que sí se han firmado, ha estado la construcción del puente entre Nisa (Alentejo) y Cedillo, en Cáceres, y el puente sobre el río Guadiana entre Alcoutim (Algarve) y la frontera con Huelva.

“Una Cumbre productiva”, según Pedro Sánchez

El presidente español ha señalado que lo que los españoles ahora sentimos hacia los portugueses ya no es solo afecto “sino también admiración”, recalcando una vez más el pragmatismo de la colaboración ibérica reciente.

A mediodía, la comitiva hispano-lusa ha paseado por algunas calles del centro histórico de Viana do Castelo, donde el trazado medieval convive con los bulevares decimonónicos de fachadas palaciegas. Los miembros de la comitiva española han sido invitados a probar la famosa Bola de Berlim de la Confeitaria Natário y a Pedro Sánchez le ha sido ofrecida una camisa con el tradicional bordado miñoto.

Después, desde la cima del Monte de Santa Luzia, donde se encuentra la Basílica del Sagrado Corazón de Jesús, han podido apreciar la extensa panorámica del estuario del río Lima, que alcanza tierras de los dos países. Más arriba del templo, está la Pousada del Monte de Santa Luzia, perteneciente al conocido grupo hotelero Pousadas de Portugal, donde ambas comitivas firmaron los acuerdos de colaboración y disfrutaron de un almuerzo.