Cómo diferenciar la depresión de la ansiedad
Dos conceptos que no siempre van de la mano y que, en ocasiones, cuesta diferenciar a la hora de realizar un diagnóstico
La ansiedad y la depresión son dos trastornos mentales que van de la mano. Son muy parecidos, pero a la vez hay que saber diferenciarlos porque no son lo mismo.
En muchas ocasiones cursan la una con la otra y en otras ocasiones es diferente y puede llegar a costar diferenciarlo. Según María Hernández, psicóloga de la Asociación Salud Mental Salamanca, la ansiedad es esa sensación de preocupaciones excesiva, es más preocupada constantemente. Preocupación de anticipación, de que algo malo va a ocurrir constantemente, se puede decir que viven en un estado de alerta.
Por su parte, la depresión se centra un poco más en pensamientos negativos, derrotistas, de soledad, de no valgo para nada, de culpabilidad. En ese caso tendemos más a pensar que todo nos va a salir mal, que todo es nuestra culpa. Pensamientos distorsionados, que son negativos y que nos afectan. El tipo de sentimientos que tengamos hacen que interfieran con nuestra conducta. A veces los pensamientos no son realidades, son formas de interpretar la realidad, lo que nos está sucediendo, que estamos preocupados, desanimados, tristes… pensamientos negativos que invaden a la persona y hacen que sufran en exceso. Hay que aprender a identificar esos pensamientos negativos y poder modificarlos para unos pensamientos más racionales, más realistas y sobre todo más neutros.