Las cinco rutas arqueológicas que te van a enamorar de la provincia salmantina

Con un nuevo fin de semana a la vuelta de la esquina y loas buenas temperaturas que regresarán a Salamanca y provincia, que mejor manera de disfrutar de estos días que disfrutando de rutas arqueológicas. Porque sí, toda Castilla y León es rica en yacimientos arqueológicos y Salamanca es un claro ejemplo de ello.

A continuación, te proponemos una ruta rica en la provincia, que aúna historia y arte en un mismo recorrido. Va desde El Cabaco hasta Siega Verde, recorriendo diferentes lugares de la provincia que invitan a descubrir el pasado y la historia de la provincia.

Las Cavenes (El Cabaco)

Se trata de un conjunto arqueológico que se encuentra en el término municipal de dicho municipio, a los pies del monte de la Sierra de Francia. Constituido por las estructuras resultantes de una explotación aurífera romana y del asentamiento humano, conocido como Fuente de la Mora, datado entre la primera mitad del s. I d.C y finales del s. II d. C. y excepcionalmente conservado. Considerado como Bien de Interés Cultural de la provincia, se encuentra situado al lado del Convento de Nuestra Señora de la Peña de Francia y del Santuario. Más información y cómo llegar pinchando aquí.

Fuente foto: http://www.salamancaemocion.es/

Las Batuecas (La Alberca)

Una muestra importante de arte rupestre está en el valle del río Batueca. Fechadas entre el 4.000 y el 4.500 a. C. Catorce de ellas se encuentran protegidas con cerramientos y existe ya una señalización del recorrido. El aula arqueológica situada en La Alberca facilitará la comprensión de la visita. Además, esta localidad cuenta con varios museos y centros de interpretación para conocer aún más detalladamente su historia. Más información y cómo llegar pinchando aquí.

Fuente foto: http://www.salamancaemocion.es/

Fortificaciones de la frontera Hispano-Portuguesa

La Raya salmantina con Portugal cuenta con fortificaciones históricas y yacimientos entre los que destacan tres localidades cerca de la frontera. Por un lado, en el municipio de San Felices de los Gallegos hay un aula histórica en la restaurada torre del homenaje del castillo, con un recorrido que permite conocer los elementos más interesantes de los recintos fortificados del pueblo. Otra de las localidades que se incluyen en esta zona de la provincia es la localidad de Aldea del obispo. Las características arquitectónicas de estas fortalezas son las de las estructuras fortificadas que se construyeron en toda Europa en los siglos XVII y XVIII como modelo defensivo de ciudades estratégicas. Este puede ser el mejor ejemplo de arquitectura militar fortificada de toda la parte occidental de la península: El Fuerte de la Concepción. Por último, pero no menos importante, Ciudad Rodrigo. Una villa fortificada casi en su totalidad, posee un centro de interpretación de las fortalezas situado dentro de la zona amurallada. Más información y cómo llegar pinchando aquí.

Fuente foto: https://aytoaldeadelobispo.es/

Siega Verde (Villar de la Yegua / Castillejo de Martín Viejo)

También la comarca de Ciudad Rodrigo, se encuentra el yacimiento de arte rupestre de Siega Verde (del 20.000 al 11.000 a. C.), uno de los más reconocidos a nivel provincial y nacional, que fue declarado Patrimonio Mundial por la UNESCO (2010) y Patrimonio Rupestre Europeo (2018). Cuenta con grabados paleolíticos en piedra a orillas del río Águeda. 645 representaciones de animales y signos esquemáticos realizados con la técnica del piqueteado, que delimita la figura a base de puntos o mediante la incisión a través de una línea fina. Más información y cómo llegar pinchando aquí.

Fuente foto: http://www.salamancaemocion.es/

Castro de Yecla La Vieja (Yecla de Yeltes)

Dicho castro cuenta con el atractivo añadido del aula arqueológica, que alberga la que se considera como la más importante colección de arte vetón. El castro de Yecla la Vieja, también conocido como “El Castillo”, se localiza a un par de kilómetros al sur del pueblo de Yecla y constituye una de las fortificaciones prerromanas más espectaculares de la Península Ibérica. Es un poblado de larga ocupación, quizá llamado originalmente Virlanga. Fue levantado en torno al siglo V antes de Cristo por los vetones, y estuvo ocupado por ellos y sus descendientes hispanorromanos durante casi mil años. Se cree que los conflictos provocaron durante la repoblación de Ledesma en el siglo XII el abandono del asentamiento por la nueva aldea de Yecla, aunque en época de los Reyes Católicos se levantó una ermita dentro del recinto, la de Nuestra Señora del Castillo. Más información y cómo llegar pinchando aquí.