Cáritas atiende a 16.106 personas a través de 23 programas, 11 centros y 29 equipos parroquiales
Presentación de la memoria de Cáritas
La organización diocesana repasa su trabajo de 2021 en diferentes ámbitos con motivo de la celebración del Día de la Caridad este 19 de junio
La iniciativa #HazMemoria repasa la dimensión caritativa de la Iglesia, que en su mayor parte se realiza desde Cáritas diocesana. En Salamanca se acaba de presentar la memoria anual de esta entidad social, con motivo de la celebración del Día de la Caridad, el 19 de junio, bajo el lema “Somos lo que damos. Somos amor”. En 2021, atendieron a 16.106 beneficiarios directos, a través de 23 programas, 11 centros y 29 equipos parroquiales, con una inversión de 5.290. 222 euros.
Grupo de trabajo en Ranquines
Dentro de la acción social de Cáritas destaca la animación comunitaria, que está presente en cada barrio, pueblo y territorio de la diócesis a través de la comunidad cristiana. En Salamanca hay un total de 29 grupos parroquiales, 19 en la ciudad y 10 en la zona rural, con 167 voluntarios. El año pasado se destinaron 32.030 euros a esta finalidad.
En acogida y atención primaria, atendieron a 2.518 familias, con 4.478 participantes, y una inversión de 1.569.461 euros. Otra área importante es la atención a la infancia y juventud, con ludotecas, apoyo escolar, ocio y tiempo libre y la educación en la calle. En 2021 atendieron 419 niños y adolescentes, y 71 jóvenes. El dinero invertido fue de 258.439 euros.
Atención a los mayores
El año pasado también tuvieron que adaptar la atención a los mayores debido a la pandemia, pero con opciones para que siguieran con las actividades de los talleres pero desde sus casas. En total, se beneficiaron de este programa 177 mayores, con 59 familias acompañadas, y 37.445 euros invertidos.
Clases de alfabetización
En la atención a inmigrantes, se atendieron a 1.318 personas, con el asesoramiento y acogida en la zona rural de 127. Una de las actividades son las clases de español a 144 personas, 112 en el centro Baraka. La inversión total fue de 165.319 euros. Otro ámbito de actuación fue hacia los adultos y familias, con 2.956 familias atendidas, y 1.774 de acompañamiento.
La inclusión social es otro de los pilares de Cáritas diocesana de Salamanca, centrado en las personas afectadas por situaciones muy duras de exclusión social: sinhogarismo, la prisión o las drogodependencias, etc. En Espacio Abierto dieron acogida a 405 personas, 199 nuevas en 2021, y de ellas, 173 participaron en talleres y actividades grupales. El coste de este servicio para la organización fue de 246. 350 euros.
90 personas en Padre Damián
En el centro de acogida Padre Damián dieron cobijo y apoyo a 90 personas, y 30 acompañaron en la calle desde el proyecto Pándano. En la atención a drogodependencias, en el programa Lazarillo participaron 119 jóvenes y 93 familias. Y en el centro penitenciario de Topas, 269 internos se atendieron, con 94 familias a través de este servicio. Esta organización diocesana cuenta con un centro de día de atención integral, con 54 personas atendidas y 18 familias.
Centro de día Padre Damián
En la casa de acogida Samuel atendieron a 32 enfermos de VIH-Sida en riesgo de exclusión, 19 de ellas residiendo allí. Cáritas dispone de un equipo de atención psicosocial en el centro penitenciario de Topas, donde vieron a 337 personas, con 45 personas avaladas para permisos y la participación de 145 personas en actividades ocupacionales y terapéuticas. Por el centro de día Ranquines, para personas con problemas de salud mental, pasaron 79 personas y 11 familias.
Otro de los esfuerzos de esta entidad social fue la inserción laboral, tras el incremento del desempleo por la pandemia, en especial, a determinados colectivos en riesgo de la población. Además de la información y orientación, se formaron a 171 personas en cursos de formación laboral, en un total de seis cursos.
El apoyo laboral para la inserción
Asimismo, realizaron la intermediación laboral, con 384 personas atendidas en la agencia, con la gestión de 105 ofertas y 97 recibidas. Cabe destacar que 172 personas han conseguido empleo a través del acompañamiento y los recursos ofrecidos por Cáritas.
Durante la presentación de la memoria, el obispo de la Diócesis de Salamanca, Mons. José Luis Retana, recordó que se trata de un acto de transparencia, “Cáritas no es una ONG al uso, nace de la eucaristía, que es el culmen de la vida de la Iglesia”. Además, reconoció la “ingente labor que hace en nuestra diócesis”. El prelado añadió que la fiesta del Corpus dice que “vayamos donde nuestros hermanos necesitan ayuda”.
La directora de Cáritas diocesana de Salamanca, Carmen Calzada, insistió en que la tarea de la organización, “quiere ser una ventana abierta a la esperanza para todos, y de forma especial, para los más desatendidos, los pobres”. Y su finalidad, según remarcó, “es que nadie se quede sin lo que necesita para vivir con dignidad, que nadie esté privado de sus derechos”.
El secretario general de Cáritas diocesana de Salamanca, José María Rodríguez, desgranó algunas cifras de la memoria de 2021, que se recogen a lo largo de 68 páginas, “de números, de datos económicos, el número de personas atendidas, las realidades”.