La Seráfica Hermandad recupera sus actividades cuaresmales de los viernes
Además estrenan nueva sede en la Calle Mayor donde poder contemplar su nueva imagen titular llegada en 2020.
Tras dos años de ausencia, las cofradías y hermandades de Béjar comienzan a calentar motores de cara a la Semana Santa. Por ejemplo, dentro del marco de las actividades cuaresmales y de Semana Santa, la Seráfica Hermandad del Divino Salvador en Su Pasión y Nuestra Madre Dolorosa ha organizado una conferencia que será impartida por el psicólogo bejarano Mateo Javier Hernández Crego, quien fue pregonero de la Semana Santa 2019, última edición antes de la pandemia del coronavirus.
Se trata de una charla titulada “Psicología y prácticas de piedad” en la que el autor bejarano, conocido por sus intervenciones en radio (realiza los programas “Cómo vivir mejor” en EsRadio y “Vida Positiva” en la Cadena Ser) y caracterizado por sus exposiciones didácticas y transgresoras, analizará la evidencia científica de la fe y presentará los beneficios psicológicos de los ejercicios de piedad, en un evento apto para todos los públicos.
La cita tendrá el próximo viernes 18 de marzo, a partir de las 19:30 horas, en el salón de actos del convento de San Francisco, Centro Municipal de Cultura de Béjar. Será un acto abierto y con acceso gratuito para todo el público hasta completar el aforo.
Nuevo hogar de la Seráfica
Además de este acto y de la salida de los hermanos avisadores, la Seráfica Hermandad bejarana estrena una nueva sede, un local cedido en la Calle Mayor, donde ya descansa la imagen titular que llegó a la localidad a final de verano de 2020 y que hasta ahora había descansado en el Ábside de San Gil. Mercedes Soria, Hermana Mayor, ha mostrado su “alegría” por el nuevo emplazamiento e invita a los bejaranos y bejaranas que lo deseen que acudan los viernes de cuaresma por la tarde, momento en que los hermanos realizan una oración y puedan “ver la imagen y disfrutar de su belleza”.
Se trata de una obra del imaginero sevillano Juan Manuel Montaño que representa la imagen de Cristo en el momento del prendimiento cuando los soldados guiados por Judas acuden a Getsemaní y preguntan por Jesús de Nazaret y él responde “soy yo”. La imagen es de Candelero con el busto y los brazos tallados en madera de cedro. Cuenta con una altura de unos 1,80 metros y un peso de 40 kilos y cuenta con las manos y los brazos están articulados. Es un Cristo vestido de blanco y marrón con telas sencillas conforme a la tradición franciscana que profesa la Seráfica Hermandad. La Hermana Mayor espera que en este 2022 “pueda verse desfilar esta imagen por las calles de la localidad” afirma Mercedes Soria.