El adiós definitivo a las Trinitarias en Villoruela y el cierre del Monasterio ya tiene fijada fecha y hora
El Monasterio de las Trinitarias de Villoruela cierra sus puertas este sábado
La congregación celebrará una misa para poner punto y final a más de 500 años de historia en la localidad
La despedida a las hermanas Trinitarias de Villoruela y el cierre definitivo del Monasterio Santa María la Alta ya tiene fecha y todo dispuesto para hacer efectivo su adiós a la localidad y su convento, tras más de 500 años de historia y arraigo en el municipio y la zona. Un adiós que se llevara a cabo este próximo sábado 19 de marzo, a las seis y media de la tarde, cuando se celebrará una eucaristía de despedida en la iglesia del convento, emotivo acto que podrá contar con la presencia de fieles y vecinos.
Un sencillo acto, tras el que se cerraran definitivamente las puertas del convento, que pone punto y final a su historia en Las Villas debido al estado de casi “ruina” que presentan las instalaciones, lo que ha generado que las hermanas se trasladen a El Toboso en Toledo, para iniciar una nueva etapa de retiro fuera de los históricos muros de Villoruela.
Tras ponerle punto y final a su estancia, arrancará un nuevo proceso que a lo largo de la próxima semana dará comienzo el desmontaje de los elementos de mayor valor tanto de la iglesia como del convento, labores que se desarrollarán durante las próximas semanas, con el fin de evacuar los diferentes elementos históricos del inmueble antes de su desaparición definitiva con el cierre total y el abandono de las instalaciones
La desaparición de la congregación de Villoruela llega debido al mal estado que presenta el edificio, algo especialmente destacado en la cubierta, cuyo estado se ha visto agravado en los últimos años. Una situación extrema, que no ha contado con el apoyo de la congregación ni la diócesis, llegando incluso a ser cedido de manera gratuita al Ayuntamiento, algo inviable para el Consistorio debido a la importante inversión que requiere su arreglo. Una situación que ha generado el adiós de las Trinitarias y con ellas la llegada de punto y final definitivo a más de 500 años de vida del Monasterio, lo que le supone ser el más antiguo de la congregación y uno de los patrimonios de mayor valor histórico en toda la zona.