La concienciación de los salmantinos ha generado un verano creciente en usuarios a las piscinas...

Estamos inmersos en la recta final de un verano más atípico de lo que quizás podíamos plantearnos cuando la pasada primavera soñábamos con él y todo lo que nos iba a ofrecer. Ha sido y es una época en la que nuevamente hemos vivido marcados por los protocolos de seguridad y sanitarios frente al Covid-19, algo que se ha hecho notar de manera más especial en algunos de los sectores que arrancan su maquinaria y se mantienen a pleno rendimiento durante este tiempo.

Uno de esos sectores es el de las piscinas al aire libre, grandes recintos preparados para recibir cientos o miles de bañistas, quienes también se han tenido que adaptar a la normativa, algo que en ocasiones, se ha traducido en miedo o dudas a la hora de acudir a ellas.

Piscis (Piscinas Municipales de Salamanca) es un buen símbolo de este sector municipal, que se ha preparado a conciencia durante todo el año para abrir ofrecer sus instalaciones con todas las garantías de seguridad a los usuarios.

Hoy, Piscis continua con la gestión de las piscinas salmantinas de la Alamedilla, Garrido y San José, además de ofrecer contar con las de Aldehuela, Tejares, Pizarrales y Rosa Colorado, lo que suponen un total de 7 recintos municipales gestionados por Clequali piscis.

En cuanto a las normativa que se ha seguido y se mantiene en todos los recintos de las piscinas, se encuentran cuestiones vitales como la desinfección e higienización de todos los espacios cada jornada, antes y después de su utilización además de ser obligatorio el uso de la mascarilla en todo el recinto o la prohibición de utilizar toallas ni otros accesorios de aseo con otros usuarios fuera del núcleo familiar.

En cuanto a los controles del agua también esta temporada han sido reforzados con tres controles de medición diaria en todos los vasos, lo que permite saber en todo momento la situación en cuanto a parámetros del agua de todos los recintos de la ciudad.

Una batería de medidas y una situación que ha dejado una realida

d distinta a la que se podía plantear al inicio de la campaña estival. "Hemos podido funcionar dentro de la normalidad relativa que vivimos actualmente, sin necesidad de suspender ningún servicio ofertado. A su vez, instalaciones como San José han podido reforzar y ampliar su oferta de fitnes acuático por lo que los usuarios han podido elegir horario de realización de sus actividades preferidas, escogiendo en una amplia oferta semanal con más de 50 clases semanales" explican desde Piscis.

En cuanto a la afluencia de público a las piscinas salmantinas, la situación parece haber sido cambiante ya que, tal y como aseguran, "ha ido creciendo en comparación al verano anterior, por lo que parece que la situación evoluciona positivamente , aunque debido a los ajustes de aforos no se puede comparar con veranos anteriores a este", mientras que en cuanto a la actitud de los bañistas afirman que "no somos espacios ajenos a las sensaciones de incertidumbre que todos hemos experimentado estos últimos meses, pero afortunadamente notamos como la gente poco a poco se muestra más segura dentro de las mejoras que se han ido experimentado en cuanto la situación de restricciones sanitarias que hemos vivido estas últimas temporadas".

Una nueva realidad que ahora, enfilando la despedida de la temporada, comienza a ofrecer los primeros análisis de actividad, a falta de las cifras detalladas globales definitivas. Sobre esta cuestión, desde Piscis detallan que "a lo largo de estos meses hemos podido comprobar como los estudios que indicaban que las piscinas son entornos seguros por la presencia de cloro en ellas, ha sido cierto. Gracias a la concienciación de la gente y su colaboración en el cumplimiento de las normas sanitarias de prevención establecidas por las autoridades, las piscinas han sido entornos seguros que han permitido a los ciudadanos mantener la posibilidad real y normal de hacer actividad física en un espacio seguro, lo cual también es necesario y saludable, ya que la inactividad también es un riesgo potencial para la salud.