El Guijuelo nada para morir en la orilla al dejarse empatar en el añadido por el Compostela (1-1)
Kamal abrió la lata para los chacineros, pero un error grave de Josín acabó con las esperanzas de sumar los tres puntos
El Guijuelo nadó para morir en la orilla al dejarse empatar en el añadido (1-1). Kamal abrió la lata para los chacineros en la primera parte, pero un error grave de Josín acabó con las esperanzas de sumar los tres puntos. De este modo, los salmantinos no pudieron cumplir con su cometido en una batalla que se quedaron a poco de ganar.
Por su parte, Jacobo Montes no quiso hacer muchas rotaciones con lo visto sobre el césped del Estadio Helmántico el pasado fin de semana, aunque sí que hizo debutar a Lucas Puime, mientras que dejó a Miguel Fernández, su último fichaje, fuera de la convocatoria para el choque de este lluvioso sábado.
El duelo comenzó con un acercamiento visitante por medio de Juampa Barros, uno de los futbolistas con mayor talento de todo el cuadro de Santiago. No obstante, Raúl Parra contestó pocos instantes después con un disparo que se fue desviado por encima del marco defendido por Pato Guillén. Mientras, en el 9', Josín evitó el 0-1 de Brais Abelenda.
Tras ello, la intensidad del duelo bajó y hubo que esperar un buen rato para escuchar otro "¡uy!" por parte del banquillo charro tras un tiro de Zamorano, dado que el feudo chacinero no contó con público en sus gradas por la situación de Guijuelo con el coronavirus. Por su parte, Kamal logró ver puerta y declinar la balanza al filo del intermedio gracias a una peleada asistencia de Isma Cerro.
Así, con el 1-0, se marchó el duelo al descanso con victoria temporal de los verdes. Tras la reanudación, el Compostela dio un paso al frente y Salcedo tuvo que demostrar su valía a un zambobazo de Juampa Barros desde muchísima distancia. A partir de ahí, el partido cayó en un carrusel de cambios y numerosas llegadas en las que el Guijuelo logró aguantar hasta que Josín falló.
El central regaló un gol con un error de bulto tras un centro sin demasiado peligro de Roberto Baleato, pero que acabó en la portería defendida por un José Salcedo que solo pudo hacer la estatua ante el cabezazo de su compañero en la recta final. Duro golpe para el Guijuelo en casa.