Cafetería Milán: El templo de las tapas con identidad propia en Peñaranda

Ha sido bautizado popularmente desde hace años como la 'Boutique del aperitivo' y razón no les falta. Entrar en Cafetería Milan y otear desde la misma puerta la colorida, variada y aromática barra de pinchos es disfrutar con la vista y activar el paladar. Nadie se resiste a llegar y ver con calma y meditación las mas de medio centenar de tapas que a diario protagonizan el que sin duda es uno de los establecimientos más seguidos por vecinos y visitantes.

Una cocina cuidada, con pinchos que se basa en la gastronomía más tradicional y elementos que ya son un clásico conocido por todos, como su Chanfaina cada fin de semana, las paellas, o los guisos de lengua o callos, con no pocos seguidores. A ellas se suman sus únicas empanadillas, bocatines de todo tipo, hamburguesas caseras, croquetones artesanos, su conocido morro rebozado, el

"taco" de atún o clásicos como su jeta asada o frita, son solo algunos de los ejemplos de una barra con décadas de historia, regentada de manera familiar, algo que también se trasmite a sus numerosos clientes cada día.

Desde primera hora, con sus desayunos, pasando por el aperitivo de media mañana, la conocida como 'hora del vino' del mediodía, su gran variedad de cafés o el tardeo con amigos y familia?todo un día para disfrutar de manera diferente y unas tapas generosas que son un reclamo de la gastronomía local, atrayendo la atención de locales y visitantes, siempre arropados por un trato cercano y dispuestos a asesorarte si te asaltan las dudas en la elección, algo más que común al recibir la descarga visual que ofrece sus varios pisos de pinchos con historia y tradición, ofrecidos desde su base, en la Plaza Nueva 3 en Peñaranda.