El Colegio Arzobispo Fonseca deja de acoger pacientes con coronavirus
Fachada del Colegio Fonseca. Foto EP
La medida se toma tras la progresiva reducción de afectados, que ha permitido al Clínico y al Hospital de los Montalvos atender a los enfermos
El Colegio Mayor del Arzobispo Fonseca de la Universidad de Salamanca (USAL) ha dejado de prestar servicios sanitarios una vez que los responsables médicos han dado de alta a los últimos pacientes afectados por el coronavirus que permanecían en las instalaciones.
Esta decisión de dejar las dependencias libres de uso se adoptó tras confirmarse una progresiva reducción en el número de afectados por la enfermedad lo que ha permitido al Hospital Clínico Universitario y al Hospital de los Montalvos atender a los enfermos sin necesidad de utilizar Fonseca.
La Universidad de Salamanca, ante el incremento del número de pacientes afectados por la COVID-19 a primeros del mes de abril, puso a disposición del Sacyl las instalaciones de la residencia universitaria, ha recordado la USAL en la información remitida a Europa Press.
Las 42 habitaciones se transformaron en espacios para la recuperación de los enfermos leves infectados por el coronavirus, que fueron atendidos por un equipo sanitario compuesto por cinco médicos, seis enfermeras y cinco auxiliares divididos en turnos, coordinado por el doctor Ángel Batuecas y la responsable de enfermería Clara Cabrera.
La instalación contó con 48 camas y el día de mayor pico acogió a 35 pacientes, hasta reducirse la pasada semana a solo cinco, como ya informó entonces en rueda de prensa telemática el rector de la USAL, Ricardo Rivero.
DESINFECCIÓN
Una vez desalojado todos los pacientes la vuelta a la normalidad del histórico colegio pasa en primer lugar por acometer "un exhaustivo proceso de limpieza y desinfección en las habitaciones en las que han estado ingresados los pacientes", ha reconocido la USAL.
Se trata de una limpieza terminal (que incluye todas las superficies horizontales y verticales) y posterior desinfección vía área con máquina de aerosolización (proceso automático), que utiliza como producto de desinfección peróxido de hidrógeno.
En cuanto a las zonas comunes, que son espacios abiertos), no se puede utilizar el sistema automático, por lo que se utilizará la aplicación manual, ha indicado la Universidad de Salamanca.