El uso de mascarilla será "altamente recomendable" en el transporte público, según el Gobierno

El uso de mascarilla en el transporte público urbano y metropolitano será "altamente recomendable" en el nuevo escenario de desescalada y paulatino aumento de la actividad y la movilidad diseñado por el Gobierno, según indicó la secretaria general de Transportes, María José Rallo.

Se trata de uno de los puntos que incluye la guía de recomendaciones que el Ministerio de Transportes ha diseñado para adaptar las Cercanías, el metro, los tranvías y los autobuses urbanos a esta desescalada. El plan ha sido remitido para su debate a las distintas comunidades autónomas.

En la guía se fijan distintas medidas para evitar "que una mayor movilidad suponga un mayor riesgo de contagios", indicó Rallo. "Tratamos de poner todos los medidas para que no suponga un paso atrás" en la lucha contra el virus, añadió.

La 'alto cargo' de Transportes confirmó que en las primeras fases de la desescalada los transportes colectivos de larga distancia, los trenes AVE o los autobuses de línea, seguirán restringidos, dado que no se permitirá viajar entre provincias hasta el final del plan de desconfinamiento.

Por ello, el único transporte que verá aumentado su uso en esta desescalada será el urbano y el metropolitano. "La movilidad es esencial para la vida social y la actividad económica, pero hay que tratar de romper la relación entre más movilidad y más contagio", indicó la secretaria general.

Con este fin, el documento incluye tres tipos de medidas. Un primer grupo centrado en aumentar la oferta de transporte, un segundo para gestionar la demanda, esto es, evitar 'horas puntas' y aglomeraciones, y en tercer lugar, un aumento de las medidas de prevención y seguridad.

MÁS FRECUENCIAS Y ELIMINAR 'HORAS PUNTA'

En cuanto a la oferta del transporte, por un lado se aumentará en lo posible el servicio de Cercanías, metros y autobuses, "con más frecuencias y circulaciones", para reducir el número de viajeros en los vehículos y garantizar así las distancias de seguridad recomendadas por Sanidad entre los pasajeros.

Además, se habilitarán transportes de refuerzo, como pueden ser autobuses 'lanzadera' entre distintos puntos de gran afluencia de viajeros. Asimismo, se fomentarán y recomendarán, para los trayectos de menores distancias, los transportes denominados de 'micromovilidad', como puede ser la bicicleta, e incluso caminar.

Respecto al segundo lote de medidas, las relacionadas con los viajeros, tienen como fin eliminar las franjas de 'hora punta' en las que mayor número de viajeros se concentran en los transportes.

En el caso de Cercanías, en un día normal, entre el 25% y el 30% de los pasajeros diarios se concentran entre las seis y las nueve de la mañana, cuando llegan a contabilizarse hasta seis personas por metro cuadrado, según detalló Rallo.

Para evitar estos casos que se daban antes de la crisis, el Ministerio propone, por un lado, que las empresas escalonen los horarios de entrada y salida a los trabajos, y sigan fomentando el teletrabajo a turnos o días. Por otro lado, plantea medidas para controlar la afluencia de viajeros en las estaciones.

El tercer grupo de iniciativas del plan se dirige a reforzar las medidas de prevención y seguridad. En este sentido, el Gobierno fija como "altamente recomendable" el uso de mascarillas en estos transportes para garantizar la prevención en momentos puntuales en los que no sea posible mantener las distancias.

Además, asegura que se habilitarán geles hidroalcoholicos en las estaciones, se recordará la necesidad de mantener distancia por megafonía y por paneles informativos, se recomendará pagar con tarjeta o se dispondrán pantallas protectoras para los conductores de autobús.

ADAPTABLE A CADA CC.AA.

El Departamento que dirige José Luis Ábalos pretende que las comunidades autónomas adapten este conjunto de recomendaciones a las realidades de cada territorios y transporte.

Por lo que a Cercanías respecta, transporte de competencia estatal, asegura que Renfe y Adif ya están implementando medidas como es la reordenación mediante señales de la circulación y tránsito de viajeros por las estaciones para evitar cruces y aglomeraciones.

La 'alto cargo' de Transportes asegura que se trata de un "documento abierto y vivo" para el diálogo con las comunidades autónomas y los consorcios de transporte, con el fin de "intercambiar ideas, mejorarlo e ir adaptándolo al paulatino aumento de la movilidad".