El campo de fútbol de la Dehesa estrena césped, drenaje, graderío y valla perimetral
Las actuaciones, que se han prolongado durante año y medio, suponen una inversión de 50.000 euros a las arcas municipales, correspondientes a partidas presupuestarias de los años 2017 y 2018
El Campo de Fútbol de la Dehesa estrenará mañana césped, drenaje y riego automático tras las diferentes actuaciones acometidas para mejorar el estado que presentaba el terreno de juego en los últimos años. A partir de mañana, el campo de fútbol tendrá unas dimensiones de 101 metros de longitud por 65 de ancho y a la vez podrá albergar competiciones de fútbol 7, en un campo cuyas medidas son de 65 metros de longitud por 45 de ancho. La pintura que delimita el campo de fútbol 11 es blanca, mientras que por su parte la de fútbol 7 es amarilla, ambas con pintura especial, resistentes al agua y ecológicas.
A las mejoras en el césped se suman también las mejoras realizadas por dos programas de Formación y Empleo. Por un lado las pantallas de protección diseñadas por los alumnos de 'Alba Fierro' y la valla perimetral del campo realizada por 'Alba Empleo Joven'.
Según el concejal de Deportes, Raúl de Arriba, "el campo se utilizará simplemente para partidos de competición oficial del Alba de Tormes CF y también de equipos albenses que compitan en el fútbol modesto, mientras que los entrenamientos tendrán lugar en el campo de fútbol antiguo".
Drenaje y riego automatico
A comienzos de agosto de 2017 se iniciaron las actuaciones con la aplicación de herbicida de contacto sobre el césped existente para eliminar las malas hierbas. Quince días después se procedió a la retirada de la capa superior del terreno y posteriormente comenzaron las labores de arado para finalizar con la nivelación de tierras.
Antes de realizar la apertura de zanjas, se instaló el drenaje, consistente en la colocación de tres líneas generales de 75 ml cada una y un grosor de 125mm. A estas líneas generales confluyen el resto de drenajes del campo, colocados en espina de pez y que han sido de 750 ml de 80 mm de grosor. Todos los tubos de drenaje han sido colocados sobre lámina geotextil y recubiertos de 20 centímetros de grava de río.
El siguiente paso consistió en la instalación del riego automático, con un total de 35 aspersores distribuidos en siete líneas de riego. Esta instalación está regulada mediante electroválvulas, que permiten regar el campo por zonas.
Semillas de cinco especies
La última parte del proceso se centró en el cierre de zanjas y la preparación del terreno para la siembra mezclando semilla de cinco especies y distintos porcentajes