El hornazo de Salamanca, tradición, historia y sabor único

El hornazo es uno de sus productos gastronómicos más típicos y representativos de Salamanca y no puede faltar en ninguna mesa el Lunes de Aguas. Su sabor único y su elaboración artesanal distinguen a este manjar que se puede disfrutar durante todo el año, aunque es en estas fechas cuando se convierte en indiscutible protagonista en todos los establecimientos salmantinos.

Su producción se multiplica en estos días para atender la gran demanda y La Casa del Pan II (en la carretera de Ledesma, 90) es uno de los establecimientos de la capital en el que se puede disfrutar del hornazo tradicional. Luis González y María Teresa Francisco nos explican el proceso de elaboración de este típico producto que este lunes será degustado por miles de salmantinos.

Harina, aceite, huevo, sal, agua y levadura son los ingredientes necesarios para elaborar la masa que después se cortará dependiendo del tamaño que se quiera para el hornazo. Sobre una primera capa se añade el relleno formado chorizo, lomo y jamón (el huevo cocido ha ido desapareciendo) y se coloca encima otra tapa de masa para cerrarlo. Finalmente se baña con huevo batido para tenga mayor brillo y se hornea.

El tamaño del hornazo varía según la demanda, aunque Luis González apunta que el que más se solicita es el hornazo de un kilo. "También se elaboran hornazos de dos y tres kilos para compartir en grupo y de ración para una persona". En La Casa del Pan II, este típico producto del Lunes de Aguas se puede encontrar durante todo el año y su venta aumenta ya durante la Semana Santa. A lo largo de todo este fin de semana, la producción será intensa para que este lunes los salmantinos puedan disfrutar de la fiesta más popular con un hornazo artesanal y de la mejor calidad.

Fotografías: Miguel Corral