Manos Unidas dará prioridad en la Operación Bocata a los que hayan comprado ticket previamente

La Delegación Diocesana de Manos Unidas presentó en la mañana del martes la nueva edición de su tradicional Campaña contra el Hambre, que desarrollarán durante las próximas semanas con el objetivo de recaudar fondos para ayudar a un proyecto en los llamados países del Sur.

Según explicaron las responsables de la Delegación, este año querían colaborar con algún proyecto en América, pero los que había disponibles eran de demasiada cuantía para las cifras que maneja habitualmente la Delegación Civitatense, de ahí que por cuarto año consecutivo se vaya a apoyar un proyecto en África, en este caso, en Zimbabwe.

Concretamente, se va a ayudar al empoderamiento de jóvenes vulnerables del distrito de Matobo, una zona situada al sur de Zimbabwe que cuenta con unos 95.000 habitantes de los cuales el 20% son jóvenes entre 15 y 25 años. Tal y como se explicó en la rueda de prensa, Matobo es una de las regiones más pobres de un país "que ya en sí es pobre" (la tasa de pobreza de la región es del 78% y el desempleo alcanza el 80%).

Lo que se pretende con la ayuda de la Diócesis de Ciudad Rodrigo es que unos 60 chicos pertenecientes a familias desestructuradas, expuestos al consumo de alcohol y drogas, robos o prostitución, mejoren su capacitación profesional dentro de los programas de formación profesional que realizan las Hermanas de la Preciosísima Sangre, entidad que función en la zona desde 1998.

Estos programas abarcan áreas como albañilería, carpintería, electricidad, corte y confección y catering, para los cuales quieren contar con nuevas herramientas y maquinarias para poder ofrecer "una formación más completa", que permita a los jóvenes emprender su propio negocio o formar una cooperativa.

Dentro de este proceso formativo, los chicos construirán 5 casas para familias, confeccionarán 80 uniformes, cocinarán para un taller de apoyo psicosocial, fabricarán mesas y sillas para una escuela y dotarán de instalación eléctrica a tres aulas. La aportación de los chicos supondrá el 12% del proyecto, aportando la Delegación Civitatense de Manos Unidas el 88% restante, que asciende a 27.365?.

Las actividades de la Campaña contra el Hambre

Para recaudar este dinero, a lo largo del año se irán sucediendo las acciones, comenzando con la clásica Campaña contra el Hambre, que constará como es tradicional de tres actividades. Para empezar, la habitual Eucaristía en el marco de la campaña, que tendrá como escenario la Iglesia de San Andrés. Será el próximo martes 27 a las 19.15 horas.

Dos días después, el jueves 1, se desarrollará la cita más esperada, la tradicional Operación Bocata en la Plazuela del Buen Alcalde, que este año tendrá una importante novedad. Debido a los problemas que viene habiendo al presentarse en la Plazuela personas que no han comprado el ticket en los días previos (haciendo esperar a los que sí lo tienen), este año tendrán prioridad a la hora de coger bocadillo aquellos que acudan con ticket, teniendo que esperar el resto a ver si sobran o no bocadillos.

Con esta medida se quiere fomentar que todas las personas que acudan lo hagan con ticket, para así poder calcular con mayor precisión el número de bocadillos que son necesarios (en los últimos años ha habido que hacer más unidades deprisa y corriendo para gente con ticket después de haber comprado bocadillos personas sin ticket). Esos tickets se pueden adquirir desde ya en la Delegación Diocesana de Manos Unidas y en las parroquias mirobrigenses, con la novedad de que el precio de los mismos ha subido de 2,5 a 3 euros.

Por cierto, que de cara a la elaboración de los bocadillos, desde Manos Unidas animan especialmente a contribuir con tortillas.

La tercera actividad de la Campaña contra el Hambre será la clásica cena solidaria, que por segundo año consecutivo tendrá lugar en el salón del edificio de la calle Velayos del Colegio Misioneras de la Providencia-Santa Teresa de Jesús. Esta cena se celebrará el jueves 8, a las 20.00 horas, y como es habitual, antes de repartirse la cena preparada por Antonio García y su equipo, habrá una conferencia, que este año será pronunciada por el párroco de El Salvador, José María Rodríguez-Veleiro, que ha estado recientemente en África.