Niños y jóvenes lideran una nueva edición de la Marcha Misionera a Ivanrey

La Delegación de Misiones de la Diócesis de Ciudad Rodrigo celebró a lo largo del domingo la Jornada de la Infancia Misionera que promueven cada año a nivel nacional las Obras Misionales Pontificias.

La tradición ya dicta que esta Jornada de la Infancia Misionera tenga como epicentro en la Diócesis Civitatense el agregado mirobrigense de Ivanrey, a donde se dirigieron todos los participantes en la Jornada en una marcha que arrancó a media mañana en el patio de la sede de Conde de Foxá del Colegio Misioneras de la Providencia-Santa Teresa de Jesús.

Allí, las alrededor de 180 personas participantes (la mayoría niños y jóvenes, acompañados por unos cuantos familiares), fueron repartidos por grupos bautizados con el nombre de los continentes, recibiendo los miembros de cada grupo un pañuelo de un color determinado. Dentro del patio del Colegio, hubo un pequeño acto, incluyendo el canto del Padrenuestro.

A continuación, comenzó la Marcha en sí, bajo un sol radiante pero con una gélida temperatura. La comitiva recorrió toda la Avenida Conde de Foxá hasta la Glorieta del Árbol Gordo, donde se detuvieron un momento antes de proseguir su marcha por la Avenida Sefarad, y posteriormente tomar la carretera de Ivanrey para llegar al agregado. Todo el recorrido fue escoltado por la Policía Local.

Una vez en Ivanrey, la primera actividad fue una eucaristía presidida por el Obispo Raúl Berzosa, que también había hecho la ruta caminando junto al resto de participantes. A la conclusión de la misa, dieron inicio una serie de actividades a modo de convivencia, que se prolongaron hasta media tarde.